Después de esta nota muchos van a pensarlo dos veces antes de mandarle mensajes venenosos al político de su desagrado. Quién sabe, en una de ésas les hace caso a sus mortales órdenes y acabarán como Michelle Carter, una joven de Massachessets quien se libró de 20 años de prisión, pero aun así estará un rato guardada por haber incitado a su novio a suicidarse.
De 17 años al momento de los hechos, la rubia animó a Conrad Roy III a concluir sus planes de suicidio. En julio de 2014, el joven de 18 años condujo hasta el estacionamiento de un supermercado para después colocar una bomba de agua que emitía gas dentro de su vehículo. Sin embargo, cuando comenzó a sentirse mal por el monóxido de carbono, descendió de su vehículo. Fue en ese momento que por teléfono Michelle le dijo que acabara lo comenzado. “Vuelve a meterte en el coche. Hazlo y punto”.
Sentencian a 15 meses de prisión a Michelle Carter, la joven que animó a su novio a suicidarse. https://t.co/84BZHzCVm3 pic.twitter.com/KLfvHR9lgi
— Univision Noticias (@UniNoticias) 3 de agosto de 2017
La petición fue obedecida por el chico sin mucha resistencia, debido a que su voluntad estaba quebrantada por la depresión que sufría… además, previamente la novia lo atascó de mensajes: “simplemente tienes que hacerlo. Dijiste que lo ibas a hacer. O sea, no entiendo por qué no lo haces”. Por esto y por no alertar a las autoridades, Carter fue acusada de homicidio involuntario. Ahora, tres años después, se ha decidido su castigo.
BREAKING: Michelle Carter, woman found guilty of coercing boyfriend into killing himself via text messages, sentenced to 2.5 years in prison pic.twitter.com/cCWpogjp3X
— NBC News (@NBCNews) 3 de agosto de 2017
De acuerdo con Lawrence Moniz, la sentencia para Michelle será de 15 meses, para luego pasar un tiempo en libertad vigilada. Además, por lo mediático que resultó este caso y para evitar que la chica saque provechó, se incluyó una cláusula con la que no podrá beneficiarse de su conocimiento de los hechos. Es decir, no podrá escribir un libro, ni ayudar a la producción de una película… mucho menos un musical.
Este asunto sienta un precedente, ya que se trató del primer caso en el que el “homicida” no estuvo presente en la escena del crimen, la víctima actuó por cuenta propia y, además, porque en Massachussets no se penaliza la incitación al suicidio. En defensa de Carter, se había alegado que ella no podía ser responsable de la muerte de su novio, debido a que en ésta influyó la depresión que sufría y como prueba estaban algunos otros intentos de quitarse la vida. Pero bueno, ella dio el empujoncito que necesitaba y ahí terminó el caso.
Quitando si fue o no feminicidio el caso mexicano de Lesvy, ¿lo ocurrido en Estados Unidos no les parece algo parecido? Hagan equipos y discútanlo.