Muy pero muy buenas noticias. Este 11 de octubre el pleno del Senado aprobó en lo general con 69 votos a favor, 2 en contra y 16 abstenciones, la eliminación de las terapias de conversión, mejor conocidas como ECOSIG.
Ojo con esto: para que pasara esto pasaron 4 años. El texto fue presentado el 4 de octubre de 2018 por senadoras de Morena, del Partido Verde y de Movimiento Ciudadano.
Un paso más para acabar con las terapias de conversión
La iniciativa fue presentada en octubre de 2018 por las senadoras Citlali Hernández de Morena, Alejandra Lagunes del PVEM y Patricia Mercado de Movimiento Ciudadano.
La idea es agregar un artículo (el 149 Quáter) al Código Penal Federal y un artículo 465 a la Ley General de Salud.
En lo que respecta al Código Penal Federal, se propone agregar un capítulo IX llamado “Delitos contra la Orientación Sexual o la Identidad de Género de las Personas”.
La idea es imponer de 2 a 6 años de prisión, así como una multa de casi 200 mil pesos, para quien “realice, imparta, aplique, obligue o financie cualquier tipo de tratamiento, terapia, servicio o práctica que obstaculice, restrinja, impida, menoscabe, anule o suprima la orientación sexual, identidad o expresión de género de una persona”.
La pena aumentará al doble cuando las terapias vayan contra menores de 18 años, adultos mayores o personas con alguna discapacidad.
De igual forma el castigo irá al doble cuando la persona autora tuviera contacto con la víctima de manera laboral, docente, doméstica, médica o cualquier otra que implique la subordinación de la víctima.
Lo mismo para quien sea funcionario público y para la persona que use violencia física, psicológica o moral contra la víctima.
Para determinar el daño ocasionado al libre desarrollo de la personalidad de la víctima habrá que hacer dictámenes. Si el Ministerio Público no lo lleva a cabo, será sancionado. El Estado debe proporcionar la atención médica, psicológica o de especialidad que requiera la víctima si ésta no puede pagarlos.
Para la Ley General de Salud , se especifican entre 1 y 3 años de suspensión en el ejercicio profesional para el personal de la salud que promueva o participe en terapias de conversión.
¿Y ahora qué sigue? El proyecto se va a la Cámara de Diputados, donde esperamos que sea aprobada pronto.