Por medio de su cuenta de Twitter, el Sistema de Transporte Colectivo Metro de la Ciudad de México informó que, por seguridad de los usuarios, no está permitido el ingreso a las instalaciones con bidones o recipientes con gasolina.
Por seguridad de las personas usuarias, no está permitido el ingreso de bidones o recipientes con gasolina a las instalaciones del Metro. La seguridad la hacemos todas y todos. pic.twitter.com/2d3t5JlG51
— MetroCDMX (@MetroCDMX) 16 de enero de 2019
Pero ¿por qué es peligroso? 🤔
De acuerdo con Protección Civil, la gasolina genera vapores explosivos a temperatura ambiente, lo que podría provocar un incendio. Los hidrocarburos tienen que ser almacenados o trasladados en envases de polietileno de alta densidad mismos que puedan resistir solventes.
Y no solo esto, esos vapores pueden ocasionar una sobrepresión y si la tapa no está sellada correctamente podría salir disparada y generar una mayor evaporación.
De acuerdo con el secretario de Salud de Guanajuato, Daniel Díaz Martínez, entre los principales riesgos de salud a la que nos exponemos si usamos un garrafón de agua potable contaminado con gasolina están la pérdida de olfato o la visión, desprendimiento de la retina, ardor y enrojecimiento de ojos, pérdida del oído, diarrea, vómito, entre otros.
Además, aparte del riesgo de incendio, el combustible se contamina y reduce su eficiencia.
El domingo pasado en la colonia San Felipe de Jesús, municipio de León, en Guanajuato, explotó un garrafón de 20 litros de combustible en una vivienda, por lo que seis personas resultaron lesionadas.
El incendio se habría generado al interior de una casa justo en el contenedor de gasolina, situación que posteriormente dañó la tubería de gas natural y —aparentemente— explotó por acumulación de gas.
Por eso no deben almacenar combustible en su domicilio 😞https://t.co/iocuKoeLbb
— Sopitas (@sopitas) 16 de enero de 2019