Si la cuenta pública 2016 salió con severas irregularidades, la de 2017 no pinta para mejorar. Al menos así lo deja ver lo que se ha detectado en la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) que supuestamente se encargaría de encaminar recursos para ayuda a los damnificados del sismo del 19 de septiembre (19-S) y, ¡sorpresa!, resulta que no fue así.
Por cierto, la Sedatu es encabezada por la nunca vinculada con transas, Rosario Robles…
De acuerdo con Animal Político, las principales broncas que presentas las cuentas de la Sedatu tienen que ver con los trabajos de reconstrucción de viviendas afectadas por los terremotos del 7 y 19 de septiembre. Éstas fueron notadas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y consisten en evidentes (y graves) inconsistencias con los datos del censo de beneficiarios.
Pequeños errores de dedazo, seguro: la Sedatu reportó que había 44 mil casas con la misma dirección, además, dejó fuera de la lista de damnificados a más de 8 millones de personas cuyas casas se ubican en zonas declaradas oficialmente como zona de desastre.
¿Más? Por increíble que parezca, en uno de los municipios que afectaron los sismos en Oaxaca, el número de casas aumentó . En 2015 Santiago Miltepec apenas tenía 114 viviendas, pero la cifra que recogió la dependencia encabezada por Rosario Robles arrojó que ya había mil 603, todas dañadas por los sismos.
Evidentemente, la ASF no pudo más que declarar que la Sedatu “no contó con un censo y un padrón suficiente y confiable para programar y priorizar los apoyos destinados a la reconstrucción y rehabilitación de las viviendas de la población afectada por los sismos ocurridos el 7 y 19 de septiembre de 2017”.
Como tenía que ser, con esos datos que se aventó a manejar la mentada secretaría, se documentó la entrega de 9 mil 442 millones de pesos por daños ocasionados por los temblores en las viviendas. Este monto difiere en 688 millones 991 mil pesos respecto de los 10 mil 131 millones que la Sedatu reportó en su diagnóstico definitivo de daños, señaló Animal Político. “Se desconoce el parámetro para calcular el monto total de daños ocasionados”, denunció la ASF.
Y, sobre todo, se desconoce a dónde fue a parar todo el dinero… aunque 720 municipios de la República fueron clasificados como zona de desastre natural, la dependencia nomás levantó información de 370 de ellos. Es decir, dejó sin cobertura a 52.4% de los municipios que necesitaban ayuda.