Los secuestros subieron durante septiembre —en comparación con agosto— de acuerdo con cifras del Gobierno Federal. Las estadísticas oficiales señalan que en el noveno mes del año se iniciaron 128 averiguaciones previas o carpetas de investigación relacionadas con ese delito.
84 de las denuncias se tramitaron en procuradurías o fiscalías estatales, mientras que las 44 restantes se presentaron ante la Procuraduría General de la República. Según los datos del gobierno, esta cifra sólo representó un par de casos más respecto a agosto, mes en el que se registraron 126 denuncias por secuestro: 83 a nivel estatal y 43 en el fuero federal.
Por triste que pueda sonar, aun con este incremento del 1.5% en las incidencias, septiembre no ha sido el mes en el que se han reportado más secuestros. De acuerdo con las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública y la Coordinación Nacional Antisecuestro, julio fue el mes en el que se registraron más denuncias por secuestro: con 141 casos.
En esta infame lista le sigue abril, con 136 denuncias relacionadas con privación de la libertad y mayo, también con 128 casos. Auuuuunque no todo son malas noticias (según las autoridades), según su medición, de enero a septiembre de 2016 sólo se registraron mil 102 casos a nivel nacional, lo cual significa una disminución de 2.1% respecto al mismo periodo de 2015, apunta Reforma.
De acuerdo con Animal Político, el titular de la Secretaría de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, señaló en un acto realizado en Guerrero, que la violencia en esa entidad no había subido, sino que lo que se había incrementado sólo era el número de homicidios. O sea, está bien que también, pero también tampoco.
¿Percibirán de las misma forma el aumento en los niveles de secuestro en el país? ¿Tenemos que sentirnos aliviados por estar un poquito ‘menos mal’ que el año pasado?
