Una de las tendencias más populares entre los jóvenes (y los que ya no lo son tanto) es el uso de vaporizadores y cigarros electrónicos, los cuales supuestamente “ayudan” a que las personas sustituyan el cigarro convencional. Si tú eres de los que cambiaron el tabaco por alguno de estos aparatos, entonces te tenemos malas noticias, pues al parecer pueden ser igual o peor de nocivos que los cigarros.
Y es que la Secretaría de Salud, a través del Comité Nacional para la Vigilancia Epidemiológica (Conave), ha emitido un aviso epidemiológico por el uso de cigarillos electrónicos y vaporizadores, y ha pedido a la población acudir a una revisión médica en caso de presentar síntomas como tos, dificultad para respirar, dolor en el pecho, náuseas, vómitos, diarrea, fatiga, fiebre o dolor abdominal.
La misma dependencia detalló que en Estados Unidos, al 27 de septiembre de 2019, se han reportado cerca de 800 casos de lesión pulmonar en 46 estados, todos derivados del uso de estos aparatos. A pesar de que no se sabe con exactitud la causa de los problemas que éstos ocasionan en los pulmones, el 77% de las personas que han resultado afectadas los han usado por un tiempo determinado.
Además de alertar a la ciudadanía en general, la Secretaría de Salud también busca informar al personal de primer contacto en hospitales públicos y privados del país para que puedan y aprendan a identificar los síntomas respiratorios que estén derivados del uso de cigarrillos electrónicos o vapeadores, los cuales, de acuerdo con los primeros estudios, contienen Tetrahidrocannabinoides (THC) y otras sustancias dañinas.
La Secretaría dijo que las personas afectadas registraron síntomas de neumonitis, la cual incluye neumonía eosinofílica aguda, neumonía lipoidea, daño alveolar difuso y síndrome de dificultad respiratoria aguda, hemorragia alveolar difusa, neumonitis por hipersensibilidad y neumonitis intersticial de células gigantes.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), el vapor que utilizan los vaporizadores y cigarros electrónicos transportan partículas muy pequeñas que pueden afectar a la salud de quien los usa, y lo hacen de una manera similar que el humo de tabaco. La Secretaría de Salud, por su parte, agrega que además contienen “metales pesados como níquel, estaño, plomo, sustancias químicas cancerígenas, saborizantes como el diacetilo, sustancia química vinculada a enfermedad grave de los pulmones”.
Con información de: SinEmbargo