No todos están hechos para subirse a los juegos mecánicos de las ferias y parques de diversiones, sin embargo, le echan ganitas y por quererse hacer los machines, aplican el YOLO y se trepan, aun a sabiendas de que la pasarán mal y, en el peor de los casos, harán el ridículo.
Como muestra este video de un chavo que se subió a una atracción llamada Sling Shot, que no es otra cosa que una especie de resortera gigante que lanza por los aires a los pobres mortales que deciden darle a sus vidas un poco de adrenalina.
Lo malo es que no todos disfrutan de la experiencia y se ponen mal, terminan haciendo un panchazo, como este jovenzuelo que se desmayó en pleno juego no una, no dos, sino tres veces.
¡Qué oso weeee!
Para colmo, cuando volvía en sí su actitud tampoco fue la mejor. Chequen:
Si ya saben cómo se pone, ¿para qué lo suben?