¿Habrá que esperar para sacar los pomos? Pues está para pensarse… para que no luego digan que no se les advirtió.
Más reconocidos por quedarse “jetones” en la chamba, los legisladores del PRI y PAN esta vez buscarán agarrar dormidos a todos los revoltosos que quieran manifestarse en contra de las reformas que serán aprobadas en fast-track, esto según acusaciones del senador perredista Luis Sánchez.
Para tal efecto, señala el del “Sol Azteca”, la bancada del tricolor y parte de la blanquiazul se han puesto de acuerdo y harán un “madruguete guadalupano”: dos días antes de que concluya el periodo ordinario de sesiones aprobarán la reforma energética con el fin de que las manifestaciones y protestas sociales se vean menos concurridas.
Aunque casi planchado el asunto, Sánchez dijo tener información de que la situación se ha complicado un poco, ya que todavía hay algunos panistas que no están maiceados del todo convencidos con lo propuesto con la reforma energética y, por lo tanto, prefieren que la discusión de dicha reforma sea pospuesta.
“Estamos conscientes de que debe haber reforma energética, pero queremos hacerlo bien, no tenemos por qué andar a matacaballo”, señaló el senador panista Ernesto Ruffo, quien remarcó que aunque fuertes las intenciones de su bancada para que sea aprobada la reforma energética, no habrá tiempo para su discusión, ya que restan tres semanas del actual periodo de sesiones y aún tienen muchos pendientes.
Pero como lo anterior nada más es para “taparle el ojo al macho” el perredista Sánchez comentó que esta semana comenzarán una campaña informativa dirigida a los Estados Unidos y empresas extranjeras que ya le están echando el ojo a la opción de invertir en México, para advertirles que tratarán de invalidar la apertura de la CFE y Pemex al sector privado.
Por otra parte también denunció que el PRI trata de invalidar la consulta que impulsa la llamada “izquierda” del país, ya que según el partido oficial sólo se pueden someter a consulta temas que ya fueron legislados… ¿pues así qué chiste?
Lo ven, así como en el futbol “el último minuto también tiene 60 segundos”, el año no se acaba cuando comienza el maratón Guadalupe-Reyes… y bajo aviso no hay engaño.