Mientras el PAN, el PRI y el PRD tienen sus propias consultas populares (para subir el salario mínimo, quitar plurinominales y en actuar en contra de la #ReformaEnergética, respectivamente), el Panal se acordó de que también es un partido político y decidió impulsar su propia consulta, aunque la tiene planeada para aplicarla hasta el 2018.
El Panal es un pequeño partido que, como bien sabemos, fue creado por Elba Esther Gordillo y que en su haber tiene a varios políticos que son, de hecho, del linaje de «La maestra». También hemos visto que votaron a favor de todas las reformas que ha impulsado el PRI sin mostrarse como una real oposición (o un actor político siquiera relevante…).
Ahora el Panal quiere recordarnos que no están de adorno (bueno un adorno se notaría, más bien nos quieren recordar su existencia) y van a impulsar su propia consulta ciudadana.
La consulta popular es un mecanismo útil porque es una manera que tiene la población de comunicar su opinión sobre un tema. Claro, en consultas de un par de preguntas que se respondan con sí o no puede parecer sesgada, pues no da oportunidad a los ciudadanos de expresar sus inquietudes específicas.
En todo casi, parece que para el dirigente nacional del Panal, Luis Castro Obregón, la Consulta Popular es importante, y su partido la apoya, ya que es un mecanismo de participación directa que brinda a la ciudadanía la posibilidad de incorporar sus opiniones en temas y políticas de trascendencia nacional.
El señor expresó:
«En 2018, propondremos consultar a la ciudadanía si están dispuestos a modificar nuestro sistema para que sea unicameral, para que sólo haya una Cámara de Diputados y no haya una Cámara de Senadores».
Para Castro, en la aprobación de las reformas, La Cámara revisora (el Senado) no realizó su labor: solo aprobaba sin más lo que mandaba la Cámara de Diputados. Eso perjudicó el proceso democrático.
¿Es una locura lo que propone el Panal?
No, la Cámara de Senadores fue creada con esa intención revisora, es por eso que tiene menos elementos, quienes, en teoría, deberían ser políticos de larga carrera con bastante experiencia (de ahí que se llame Senado, de senex, senis, que en latín significa anciano). No obstante, durante el último periodo de aprobación de leyes, en el marco de las reformas estructurales, los senadores no hicieron mucho más que simplemente ratificar lo dicho por los diputados. De suerte que cabe preguntarnos si realmente vale la pena pagar un senado que simplemente sirve par secundar lo dicho por otros órganos.
En México se pide tener más de 25 años para ser senador y claro, ser del Estado en el que fue elegido o tener residencia efectiva de más de 6 meses en él. Además, se exige no ser miembro activo del Ejército, ministro de algún culto religioso, de la Suprema Corte de Justicia, o secretario de Estado.
En México ya hemos tenido una sola Cámara como poder Legislativo. El Congreso Constituyente de 1917 (el que creó nuestra actual Constitución) era unicameral, pues así había sido establecido en nuestra Constitución de 1857.
Además de lo que nos cuesta el sueldo de los senadores, también hay que reconocer que la nueva sede del Senado nos ha llegado a costar 2 mil 623.1 millones de pesos. Y decimos “nos ha llegado a costar” porque el edificio no se hizo bien, tiene goteras y otro desperfectos en constante reparación,de suerte que los seguimos pagando.
¿Será una consulta provechosa y con efectos reales?
Bueno…. no sabemos, no tenemos mucha esperanza de que sea diferente a las otras consultas que se hacen en periodos electorales como pretexto para hacer propaganda política. En todo caso ¿ustedes que opinan?
****Vía Reforma