Lo que necesitas saber:
Ahora que las autoridades anunciaron que se incluirá una alerta de tsunami en el Simulacro Nacional 2025, queremos recordar que el más destructivo en México ocurrió hace más de 200 años.
¿Ya se enteraron o todavía no? Las autoridades federales dieron a conocer con bombos y platillos que durante este Simulacro Nacional 2025 se incluirá una alerta de tsunami, por lo que acá queremos aprovechar esta noticia para contarles cuál es el más destructivo que ha impacto México.
Alerta de tsunami en el Simulacro Nacional 2025
Antes de contarles cuál es el tsunami más destructivo que ha impacto México, les damos un poco de contexto de por qué les queremos contar este hecho histórico.
Y es que como les contábamos aquí arriba, la titular de la Coordinación Nacional de Protección Civil, Laura Velázquez, anunció en la conferencia mañanera de la presidenta Claudia Sheinbaum que durante el Simulacro Nacional 2025 se incluirá una alerta de tsunami.

Como algunos sabrán, el simulacro simulará un sismo de magnitud 8.1 con epicentro en el Golfo de Tehuantepec, justo el martes 29 de abril a las 11:30 horas.
Pero lo más interesante es que también en esta ocasión se agregará un ejercicio de alerta de tsunami en el océano Pacífico, principalmente para identificar posibles riesgos en trabajos y viviendas cercanas a esta región del país.

En el Simulacro Nacional 2025 participarán la CDMX, el Estado de México, Guerrero, Morelos, Puebla, Jalisco, Colima, Michoacán, Oaxaca, Tlaxcala y Chiapas, activando la alerta sísmica en más de 14 mil altavoces y también se llevarán a cabo pruebas e teléfonos celulares.
¿Cuántos tsunamis se han registrado en México?
De acuerdo con el mismísimo Centro de Alerta de Tsunamis, los registros históricos señalan que se han reportado más de 60 tsunamis en la costa occidental de México en los último 284 años.
Mientras que los tsunamis de origen lejano sólo han tenido olas de 2.5 metros de altura, los de origen local han llegado a tener olas de 5 metros de altura en promedio, llegando a alcanzar hasta los 10 metros de altura, provocando muertes y pérdidas de bienes y viviendas.

Aunque en la historia reciente de México no se han registrado tsunamis destructivos como los ocurridos en Chile en 1960 y 2010, el Centro de Alerta de Tsunamis pide que no se descarte la posibilidad de que fenómenos de alta intensidad no se descarten en las costas del Pacífico del país.
Y es que como mencionan ellos, durante la historia de nuestro país sí se han registrado tsunamis destructivos, como el que ocurrió en 1787 después de un sismo de magnitud 8.4 en San Sixto, Oaxaca.
El tsunami de San Sixto: El más destructivo que ha impactado Mexico
En el siglo XX se registraron unos 12 tsunamis en el país provocando diferentes daños, en el siglo XIX más de 10, y en el siglo XVIII unos cuatro, siendo uno de estos últimos el más destructivo que ha impactado México.
Sí, según el Centro de Alerta de Tsunamis, el 28 de marzo de 1787 ocurrió un enorme tsunami luego de un terremoto de magnitud 8.4 en las costas de Guerrero y Oaxaca.
Este tsunami es conocido como el de San Sixto porque, de acuerdo con el Centro Nacional de Prevención de Desastres, ocurrió el día en que se celebra a este santo católico, justo a las 11:30 horas.

Aunque se maneja que la magnitud de este movimiento telúrico pudo ser de 8.4, también se habla que pudo haber alcanzado los 8.6 grados, convirtiéndose en el sismo más grande que se ha registrado en México.
Se cree que este tsunami fue tan destructivo por sus olas que alcanzaron hasta los 18 metros de altura e invasiones del mar de hasta 6 y 8 kilómetros.
Las afectaciones del tsunami se reportaron en Oaxaca, Guerrero y Michoacán, pero el sismo se sintió hasta la Ciudad de México y Jalisco durante seis largos y eternos minutos, provocando daños en edificios.

El alcalde de Igualapan, Guerrero, describió así el tsunami en una carta publicada en la Gaceta de Acapulco en mayo de 1787: “El mar se vio correr en retirada, y luego crecer y rebosar sobre el muelle, repitiéndose esto varias veces por espacio de 24 horas, al mismo tiempo que la tierra se cernía con frecuentes terremotos. En la playa abierta se salieron de caja las aguas del mar, derramándose con fuerza y arrastrando entre sus ondas gran cantidad de ganado, que pereció. Algunos costeños, como el mayordomo de la hacienda de Don Francisco Rivas, regidor de Oaxaca, pudieron salvar sus vidas encaramándose a los árboles hasta que se retiraron las aguas. Algunos pescadores en la barra de Alotengo, a las once horas de ese día, vieron con asombro que el mar se retiraba, dejando descubiertas en más de una legua de extensión tierras de diversos colores, peñascos y árboles submarinos, y que retrocediendo luego con la velocidad con que se había alejado, cubría con sus ondas los bosques de la playa, en que se internó más de dos leguas, dejando entre las ramas de los arboles al volver a su casa, muchos y variados peces muertos; algunos de los pescadores perecieron, y otros pudieron salvarse muy estropeados”.
Sólo para que dimensionen, dos leguas equivalen a 8 kilómetros de penetración tierra adentro.
Aunque han pasado muchos años sin registrarse un fenómeno de estas dimensiones, como menciona el Centro de Alerta de Tsunamis, no puede descartarse que en el futuro se registre otro, por eso es bueno que se tome en cuenta una alerta de tsunami en este próximo Simulacro Nacional 2025.