Mundo enfermo y triste: Alertan sobre salchichas con clavos en parques de España

La Policía Nacional en España, a través de su cuenta oficial en Twitter, alertó a las personas sobre el descubrimiento de salchichas con clavos en algunos parques del país. ¿Cuál podría ser el objetivo de algo así? Lastimar a las mascotas de las personas, en concreto a los perros que salen a pasear con sus dueños.

Ahora bien. La policía no dijo en qué puntos en específico se encontraron las trampas para los animales, pero sí se sabe que han sido en varias ciudades de España, pues no es la primera vez que se da una alerta de este tipo. Hace unos días, la Policía Foral de Navarra, alertó sobre este mismo ataque anónimo hacia los animales, e incluso publicó en Twitter una imagen de cómo afecta internamente a un perro la ingesta de salchichas con clavos.

Hace dos años, aproximadamente, se repitió esta misma situación en la que se ponían alfileres en salchichas y estas eran arrojadas a la vía pública. Esa vez hubo un detenido, de acuerdo con El Mundo, el cual fue capturado después de que arrojó a su perrita a un contenedor de basura para que fuera triturada… Meses después de estos ataques, comenzaron a circular imágenes de albóndigas envenenadas en un parque de Valladolid.

Todavía no se sabe quién o quiénes dejan estas trampas mortales para perritos, pero se han debatido diversas razones para hacerlo. La que más ha sonado es la suciedad de algunas ciudades de España, por ejemplo Madrid, derivada de los excrementos y orines de los perros, un problema de higiene grave en la región. El año pasado, el Ayuntamiento de Madrid elaboró un mapa de cacas de perros para determinar qué zonas son las más sucias, revisar los espacios y sancionar a las personas que no levanten la popó de sus mascotas.

Incluso, en Meco fueron más lejos y junto al censo canino, también pidieron a los dueños que enviaran una muestra de ADN de sus mascotas para que estas estén registradas. ¿De qué sirve? Si una persona ve una caca en el piso, puede levantarla, enviarla a las autoridades para que sea analizada y enviar la multa o sanción al dueño.

Se entiende que hay un problema de higiene derivado de la popó de perros, pero nada justifica un acto de crueldad animal como este. Actualmente, las sociedades –sin importar la cultura, clases sociales o países de origen– se enfrentan a una crisis de valores humanitarios que no sólo se relaciona con la indiferencia entre seres humanos (por ejemplo, la crisis migratoria en Europa y Estados Unidos y/o el resurgimiento de grupos racistas), sino también con los animales.

En México se ha hablado de cifras impresionantes relacionadas a la crueldad animal. Algunos medios reportan que nuestro país es el tercero en cuanto a la crueldad hacia los animales, o bien, también reportan que siete de cada 10 perros son víctimas de maltrato y abandono, otra forma de violencia contra los animales. La violencia contra animales va desde abandono, hasta torturas, agresiones sexuales, falta de alimentación, golpes, y dejarlos en las azoteas sin agua, comida y atención. 

Hace unos días, salió a la luz el caso de Canela, una perrita que fue rescatada por maltrato. Cuando la revisaron los veterinarios, descubrieron que había sido abusada sexualmente por ocho personas. El caso causó indignación en redes e incluso inició una petición para exigir justicia a favor de Canela y Palomo (el macho que también sufría maltrato). Sin embargo, se trata de un caso entre miles.