En 1991, la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) se extinguió para darle paso a varias estados independientes que hoy en día tienen, por ejemplo, sus propias ligas de futbol profesional; sin embargo, no cuentan con el poderío que llegaron a tener en épocas pasadas cuando eran un solo bloque político.
No obstante, ha trascendido que Rusia es quien ha propuesto que resurja la liga soviética. La idea fue de Alexei Miller, presidente del conscorcio Gazprom (el gigante de la industria del gas en Rusia) y el presidente de la liga rusa, Serguei Priadkin, la vio con buenos ojos y la compartió con clubes locales y otras federaciones (Ucrania, Bielorrusia y Armenia), quienes estarían de acuerdo con el planteamiento.
Hace algunos ayeres, el futbol de esas latitudes era considerado como uno de los mejores, ya que tenía clubes muuuy poderosos como aquel mítico Dinamo de Kiev de la década de los 80. Ahora, precisamente el Dinamo, más otros equipos de Ucrania como Metalist, Shakhtar, Dnipro, junto a los rusos Zenit, CSKA, Anzhi y el BATE de Bielorrusia, son los primeros que han alzado la mano para dar su aprobación al proyecto.
La finalidad es conformar una liga que le pueda dar pelea a España, Inglaterra, Italia, pero no sólo en el aspecto económico, sino también en el deportivo.
No obstante, se deberá hacer una buena planeación para que la UEFA acepte esta “nueva” liga, pues para algunos, como el ex primer ministro ruso, Serguei Stepashin, el organismo que dirige el futbol europeo “ve por sus intereses”.
¿Se viene el renacer de una de las ligas más poderosas del mundo?