Los distintos cuerpos de policía, a los ojos de la ciudadanía, no son confiables. Los polis, por lo general, son vistos como embajadores de la corrupción y la mordida, además de ser señalados por abusar de su condición para obtener tal o cual beneficio. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2016, los elementos de tránsito (76%), preventivos municipales (66.7%), ministeriales o judiciales (63.3%), estatales (62.9%) y federales (55.5%) son vistos como algunos de los representantes de instituciones de seguridad más corruptos y menos efectivos.
Ejemplos hay para echar arriba. Solamente hay que retroceder unas semanas y recordar el saqueo que realizaron agentes capitalinos en Plaza Meave después de un operativo. Afortunadamente no todo son malas noticias: personajes como el policía M. Rosillo están ahí para recordárnoslo. El pasado 18 de enero, la usuaria @elvientosabe publicó una grabación en sus redes sociales en las que muestra la labor del señor Rosillo. A diferencia de los videos que pululan en Twitter y Facebook, este mostraba un lado positivo de nuestras autoridades.
El uniformado saluda a todos los automovilistas que pasan frente a él con un “buen día, que le vaya bien” o un “que dios lo bendiga“. Aunque a algunos les pudiera parecer un gesto mínimo, el saludo del poli fue muy apreciado en redes. La publicación original estaba acompañada por este mensaje: “El oficial M. Rosillo me hizo el día. Da el paso y va saludando a todos los automovilistas. Un rostro distinto de los elementos de la Policía capitalina. Si lo ven en el cruce de Ponciano Arriaga y Plaza de la República salúdenlo y les devolverá una sonrisa”.
El oficial M. Rosillo me hizo el día. Da el paso y va saludando a todos los automovilistas. Un rostro distinto de los elementos de la Policía capitalina. Si lo ven en el cruce de Ponciano Arriaga y Plaza de la República salúdenlo y les devolverá una sonrisa pic.twitter.com/5k2w1L6ai7
— Angie Ávalos (@elvientosabe) 18 de enero de 2018