Como ya viene el día de muertos, te presentamos una nota de espantos y futbol.
Resulta que el 3 de octubre de este año el Oporto recibió al Paris Saint Germain en el estadio Do Dragao, en duelo correspondiente a la fase de grupos de la UEFA Champions League. Siete minutos antes del final, el colombiano James Rodríguez anotó el gol con el que el cuadro portugués se llevó la victoria.
Como era de esperarse, tras la anotación hubo gran alegría en la tribuna. Días después, una de las fotos del festejo de James Rodríguez comenzó a llamar la atención en las redes sociales. En la imagen de la agencia AP, mientras el jugador celebra cerca de las gradas, entre los aficionados puede apreciarse una figura fantasmal, grisácea, de vestimenta antigua y que a diferencia del resto del público, permanece estática.
Aquella figura espectral comenzó a ser conocida como “el fantasma de Dragao”, y por días tuvo debatiendo a detractores y defensores sobre la veracidad de la imagen. Incluso varios especialistas en fotografía vertieron su opinión sobre la foto, coincidiendo en que aquel personaje aparecía de manera muy clara como para ser la consecuencia de una mala toma o una falla en el enfoque.
No faltaron los románticos que alegaban que el futbol es un deporte que mueve pasiones no sólo en el planeta, sino en el más allá. Otros lo catalogaron como una estrategia de mercadotecnia.
Sin embargo, al parecer el caso ha sido resuelto. Y es que otro fotógrafo sacó a la luz una imagen tomada durante ese juego, en el que aparece una viejecita. La teoría dice que la anciana no se levantó a celebrar el gol por aquello de la edad.
¡Cómo ven!
Mejor ya no lleven a sus abuelitos a ver los juegos del Atlante, no los vayan a confundir con fantasmas.
