La Cámara de Representantes presentó este jueves un plan para extender por seis semanas el límite de la deuda nacional, a condición de que el presidente Obama acepte negociar temas pendientes de la agenda económica.
Ya les explicamos previametne qué es el tope de la deuda, les informamos que republicanos y demócratas se reunieron ayer para discutir sobre este cierre del Congreso y para saber qué medidas tomarán después. Según la mayoría de los economistas, si se rebasa el tope de la deuda, esto será desastroso para la economía mundial.
Después de dos semanas de inactividad por el paro de actividades en el Congreso, los republicanos propusieron elevar el techo de la deuda hasta el próximo 22 de noviembre, sin una garantía para la reapertura del gobierno federal, cerrado de manera parcial desde el pasado 1 de octubre. Los líderes de ese partido aprobarían un aumento temporal en el techo de la deuda, pero no terminan con el cierre de la Administración federal. El plan republicano extenderá, temporalmente y sin condiciones, el techo de la deuda nacional que se alcanzará el próximo 17 de octubre, y fue presentado como un gesto de buena voluntad para continuar las negociaciones encaminadas a resolver la parálisis del Gobierno, que este jueves cumplió diez días.
No responde, sin embargo, a la exigencia del presidente de que se restablezca inmediatamente la financiación de la Administración central, que permanece cerrada desde el 1 de octubre por falta de fondos. Un funcionario de la Casa Blanca reiteró que Obama ha dejado en claro que no pagaría un “rescate” o aceptaría condiciones a cambio de que el Congreso cumpla con su labor y apruebe un aumento del techo de la deuda.
Algunos ciudadanos opinan que el presidente Barack Obama y los congresistas deben elevarse sobre sus incesantes disputas y esforzarse más para poner fin al cierre parcial del gobierno, de acuerdo con un sondeo que atribuye la mayoría de la culpa a los republicanos, pero no exime a nadie en Washington.
El forcejeo en Washington sobre aumentar el límite de la deuda ya ha afectado negativamente los mercados de valores, disparado la tasa de interés y provocado que el mayor administrador de fondos de inversión de mercado monetario, haya vendido toda su deuda federal. Tan grave es la situación que consideran soluciones alternativas de emergencia. Una de ellas es la de remitirse a una enmienda constitucional de difícil interpretación para que el presidente se salte la autoridad del Congreso y decida por su cuenta pagar las deudas. La Casa Blanca se resiste a dar ese paso. Otra opción es la de hacer ingeniería financiera para tratar de afrontar algunos pagos, pero ¿cuáles? ¿Qué es prioritario, el pago de los intereses o la seguridad social? ¿Hay que calmar a los inversores o a la población? Obama dijo este martes que es imposible establecer esas prioridades
Vía: CNN