“Por uno pagaron todos”, podría aplicar en este caso. Pero la cuestión es si realmente el asunto ameritaba tal castigo.
Un camión repleto de chamacos de secundaria fue remitido a instalaciones policiacas, luego de que uno de sus aproximadamente 40 tripulantes tuvo la ocurrencia de hacerle desde su ventanilla una señal “obscena” a un uniformado.
Por lo anterior, el indignado policía en lugar de aventarse la “respectiva investigación” y de menos saber quién ofendió sus castos ojitos, implementó el clásico sistema de “inteligencia” mexicano y procedió a detener a todos los pubertos.
Para ello, solicitó refuerzos y encaminó a todos directito al Complejo de Seguridad Pública municipal, esto en Manzanillo, Colima: dos patrullas escoltaban el vehículo escolar, mientras que un agente resguardaba cada salida del autobús para evitar que alguno de los alumnos se escapara.
Los hechos se registraron justo cuando los estudiantes iban camino a sus respectivas casas. Debido a la impresión de vérselas con la justicia, más de uno de los jóvenes entró en pánico, incluso uno de las menores (el camión era tripulados por niños y niñas) sufrió un desmayo, mientras que algunos de los chavales intentaron aventarse por la ventanilla.
La delegada del poblado de Campos, Lourdes del Rocío Caballeros Arteaga, señaló que los padres de familia se encuentran bastante molestos con lo ocurrido, incluso un grupo de quejosos acudió ayer a la plaza principal de Manzanillo para exponer la situación ante el secretario general del gobierno colimense, Rogelio Rueda Sánchez.
“La indignación de las mamás es porque sus hijos son menores de edad y ellas decían que si fue uno de ellos el que lo hizo, por qué llevarse a todos los niños que iban en el camión. Definitivamente la reacción que tuvieron los elementos de Seguridad Pública no fue la debida”.
De acuerdo a las madres de los menores “no era la manera de actuar (…) mientras los delincuentes andan en la calle sueltos por qué ser tan prepotentes con estos menores estudiantes”, ya que aunque estuvieron todo el tiempo sólo en el vestíbulo de las instalaciones policíacas, no podían salir hasta que acudiera su tutor.
Por otra parte y para amolar la situación, uno de los testigos de todo este asunto señala que, efectivamente, uno de los estudiantes “paró el dedo y le dijo groserías a la patrulla” y fue por esta razón que el policía detuvo al camión… nomás que el que les hizo la seña se les fue por una de las ventanas “y nos trajeron a todos acá”…
Al final todos salieron libres sin tener que pagar alguna multa… dura forma de conocer lo que es la realidad.