De acuerdo con un análisis elaborado por Reinserta, en México 8 mil madres viven en prisión, por lo que además de estas dificultades para desempeñar su rol de maternidad pasarán el 10 de mayo presas en medio de una pandemia.
El Diagnóstico de maternidad y paternidad en prisión revela que de las 10 mil 114 mujeres que se encuentran en prisión, el 83% reportó tener entre uno y tres hijos menores de edad.
Además, el 52% afirmó que el centro en el que se encuentran recluidas no les proporciona métodos anticonceptivos, por lo que 5 de cada 10 mujeres no tienen acceso a atención ginecológica.
Pero no es todo. Aunado a lo anterior, 5 de cada 10 mujeres se sienten inseguras dentro del penal y en el 90% de los casos no se les proporcionan productos para cubrir las necesidades básicas de las y los niños al interior.
El estudio expone que en el sistema penitenciario mexicano no exista ni una sola cárcel que ofrezca programas y condiciones dignas para que las niñas y niños que visitan a sus madres y padres en prisión.
Hola, mi nombre es Carlos, pero todos me dicen Carlitos (y la verdad me gusta más). Tengo 6 años, y hace unos meses, salí del Centro Femenil de Reinserción Social “Santa Martha Acatitla”, de cariño: Santa Martha. #ReinsertaRelata (hilo)
— Reinserta (@Reinserta) May 8, 2020
¿Cuál es la situación en general de las madres en prisión?
Del total de las mujeres que fueron encuestadas, solo el 13.9% afirma que no tiene acceso a actividades educativas, mientras que el 15.3% no tiene acceso al deporte.
En cuanto a la atención médica, menos del 50% de mujeres tienen acceso a servicios médicos especializados para su sexo y dirigidos al cuidado nutricional.
Desafortunadamente, al menos 3 de cada 10 mujeres madres privadas de la libertad no cuentan con oportunidades laborales al interior del centro.