Y desde el Reino Unido llega una noticia medio preocupante sobre la salud de uno de los personajes más reconocidos del mundo entero: la Reina Isabel II. El Palacio de Buckingham confirmó que la monarca pasó la noche en el hospital después de haber cancelado un viaje oficial.
Como se imaginarán, a sus 95 años, la salud puede ser un detalle complicado.
El lado bueno es que, según un comunicado de la propia realeza, la Reina Isabel ya se encuentra de vuelta en el Castillo de Windsor y se encuentra de buen humor. “In good spirits”, confirmó la Corona británica.
La monarca dijo sentirse triste por cancelar su viaje oficial al Norte de Irlanda, pero sus problemas de salud —que no especificaron— la obligaron a descansar algunos días por recomendación de sus doctores. Llegó a su casa, según comenta el Palacio de Buckingham, a tiempo para la comida de este jueves.
Días complicados para la Reina Isabel
Aunque ha tenido apariciones públicas —la más reciente junto al primer ministro Boris Johnson esta misma semana—, le han llegado varias recomendaciones importantes de salud.
Hace unos días sus médicos le recomendaron que dejara de echarse sus tragos nocturnos. Sí, antes de dormir se reventaba un martini.
“Se le ha dicho a la reina que deje de beber por la noche, que suele ser un martini”, comentaban los reportes en los que, de paso, defendían su tradición vespertina. “No es un gran problema para ella, no es una gran bebedora, pero parece un poco injusto que en esta etapa de su vida tenga que renunciar a uno de los pocos placeres”.
También, recientemente, además del trago, fue captada usando bastón.
Aunque ya lo había hecho hace como 15 años debido a una lesión en la rodilla, en esta ocasión fue noticia internacional porque la única razón detrás era mantener el balance mientras asistía a una ceremonia religiosa en Westminster.