¿Estaba muy bien hecha o a los diputados ya les urgía irse a pedir su calaverita?
Los diputados le dieron el visto bueno -así, sin ningún tipo de modificación- a la reforma fiscal que les fue entregada por el Senado de la República. La votación quedó en un claro 299 votos a favor y sólo 160 en contra.
Así que váyanse preparando para hacer efectivo el 8% de impuesto especial que le fue colocado a la comida “chatarra”, homologación del IVA a 16% (importante si vives en la frontera), 16 % de IVA en compraventa de mascotas y sus servicios, entre otras medidas que “lejos de impulsar el crecimiento de la economía, generarán una recesión profunda”, señaló el diputado de Movimiento Ciudadano, Ricardo Monreal.
Ya que ésta era la última oportunidad -o después se sacarán algo de la chistera- para meterle o sacarle algo a dicha reforma la discusión no se hizo esperar… lástima que sobre otro tema, ya que priistas y panistas prefirieron enfrascarse en decidir si al ex presidente le gustaba o no empinar el codo:
“El es alcohólico, como ustedes son mentirosos, hipócritas y corruptos” aseveró el diputado del PRI, Víctor Díaz, a lo que los panistas exigieron una retractación; es “una enfermedad” les respondió el priista, alegando que para nada era una ofensa.
Ya encarrerados en cuanto a discutir los chismes del momento, los del PAN señalaron los “muchos rumores” que existen al presidente Enrique Peña Nieto… luego los del PRI llamaron “lacayos de la Coparmex” a los panistas y…
Bueno, en fin, la reforma fiscal así como habíamos quedado desde el miércoles.
