Lo que necesitas saber:
Los sistemas de reconocimiento facial ya son usados por diversas aplicaciones y también como método de identificación y control de accesos. Ahora sabemos, hasta para detener a supuestos responsables de delitos. Bueeeeno, acuérdense de la propuesta de Marcelo Ebrard.
Un caso que parece salido de Black Mirror: ser falsamente acusado por un sistema que, debido a la alta tecnología que manejamos en la actualidad, muchos creen a prueba de fallas. Eso le pasó a un hombre en Estados Unidos, a quien un sistema de reconocimiento facial de una tienda departamental lo embarró en un robo, provocando su encarcelamiento. Ya en prisión, fue víctima de golpes y hasta abuso sexual…
La víctima fue acusada de un robo ocurrido a miles de kilómetros de donde estaba
Harvey Eugene Murphy Jr es el nombre del sujeto al que le pasó lo descrito. Y quien, ahora, está demandando por una suma de 9 millones de dólares a la tienda departamental Macy’s, la cual lo acusó de robo a mano armada. La evidencia para mandarlo tras las rejas, fue la información de su sistema de reconocimiento social.
De acuerdo con The Guardian, el robo habría sido ejecutado en enero de 2022. El delincuente (porque sí hubo robo) se llevó miles de dólares en mercancía de Sunglass Hut, esto en una tienda de Houston. Las investigaciones hicieron que las acusaciones cayeran sobre Harvey Eugene Murphy Jr, quien fue detenido en octubre de 2023.
Sunglass y Macy’s echaron mano de la tecnología para dar con el responsable del robo. Según la demanda del hombre de 61 años, el sistema de reconocimiento facial lo identificó con base en imágenes de baja calidad obtenidas de la cámara de seguridad… sin embargo, ensu momento, las empresas pidieron a la policía ya no buscarle: ellos ya sabían quién había sido (incluso, el sistema les dio el pitazo de que estaba involucrado en otros dos robos).
Van siete casos en que reconocimiento facial inculpa a personas inocentes
Harvey Eugene Murphy Jr vive en Texas, pero en el momento del robo estaba en California. Al regresar a su domicilio, fue a las oficinas para renovar su licencia de conducir. Ahí fue donde lo detuvieron, sin explicarle mucho. Sólo le dieron la fecha en que se cometió el delito que supuestamente cometió.
En lo que se tardo en demostrar su inocencia, Harvey Eugene Murphy Jr pasó 10 días en la prisión local… para luego ser llevado a la cárcel del condado de Harris. Ahí pasó otro rato, durante el cual fue golpeado y violado (según asentó en la demanda). Al final, sus abogados demostraron su coartada y se le aplicó el clásico “ups, usted disculpe”.
“Todo esto le sucedió a Murphy porque los demandados confiaron en una tecnología de reconocimiento facial que se sabe que es propensa a errores y defectuosa“, comentaron a The Guardian los abogados del quien ahora pide 9 millones de dólares de compensanción.
Este no es el primer caso. En Estados Unidos, se sabe de seis otros, en los que un sistema de reconocimiento facial embarra a sujetos en delitos de manera errónea. Y, acá, Marcelo Ebrard lo llegó a proponer para su plan de seguridad...
