Y eso que no nos vio la semana pasada, cuando corríamos cada que a algún “gracioso” se le ocurría alertar sobre un falso saqueo.
Luego de confirmarse (por agencias estadounidenses de inteligencia) que Rusia sí metió la manota en las pasadas elecciones presidenciales, el saliente mandatario gringo, Barack Obama, reconoció dos cosas: 1) que Vladimir Putin sí es alguien de cuidado y 2) que no vio venir el trancazo mediático que significaría “la campaña de influencia” que orquestaron los rusos.
En entrevista para el programa de TV This Week, Obama aclaró que no es verdad eso que le achacan tanto demócratas como republicanos, ya que no subestimó al líder ruso… sin embargo, sí subestimó el poder de las campañas de propaganda… ya ven, el mandatario estadounidense ya no está en onda y, por ello, no alcanzó a prever que en esta nueva era “es posible la desinformación por un ciberataque”.
“Creo que subestimé el grado en el que, en esta era de la información, es posible tener impacto en nuestras sociedades y nuestros sistemas abiertos con informaciones erróneas, ciberataques, influir en nuestros sistemas democráticos de formas que creo que se están acelerando”.
Apenas el viernes, los servicios de inteligencia de los EEUU dieron a conocer el informe con el que se acusa a Vladimir Putin de orquestar todo un plan para filtrar informaciones negativas para la campaña de la ex candidata demócrata, Hillary Clinton. Esto –obviamente– en beneficio del ahora presidente electo, Donald Trump… cosa que éste ya no tiene empacho en, no digamos reconocer, pero no desmentir. “Creo que acepta los resultados y no niega que hay entidades rusas detrás de estos hackeos”, comentó ayer el futuro jefe del gabinete estadounidense, Reince Priebus.
Amiguis, Amiguis
Aunque según Priebus, Trump ordenará una que otra medida para emprender acciones contra los ciberataques y gente cercana al exótico republicano señala que habrá sanciones contra Rusia dictadas por el mismísimo hombre del impopular peinado. Los mensajes que este fin de semana emitió el futuro inquilino de la Casa Blanca, sugieren que más bien la relación con los del Kremlin será muy cordial… y si piensan que eso es malo, pues se podrán ir guardando sus comentarios.
Having a good relationship with Russia is a good thing, not a bad thing. Only “stupid” people, or fools, would think that it is bad! We…..
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 7 de enero de 2017
