De acuerdo a la mitología finlandesa y escandinava, el Kraken es una criatura marina similar a un calamar gigante, la cual emerge de las profundidades para atacar embarcaciones. Hay quienes dicen que esta leyenda puede estar basada en el encuentro de calamares gigantes de entre 12 y 15 metros de largo.
Algunas veces, este tipo de calamares gigantes han sido vistos en el mar o se han encontrado en algunas playas del mundo. El último de estos encuentros ocurrió el pasado martes en La Arena, una playa ubicada en la localidad de Pechón, en Cantabria, España. Ahí fue hallado el cadáver de un ejemplar hembra del Architeuthis dux, con un peso de 180 kilos y más de 10 metros de envergadura.
El ojo de esta criatura puede alcanzar hasta 25 centímetros de diámetro.
¡Abusados!
Se cree que al morir esta calamar fue arrastrada por las corrientes marítimas hasta la playa.
Es de la misma especie que la citada por Julio Verne en Veinte mil leguas de viaje submarino, de la que se sabe muy poco pues vive a grandes profundidades. Los lugares del planeta que tienen mayor registro de encuentros con estos cefalópodos son Kaicoura, al sur de Nueva Zelanda, y el Caladero de Carrandi, al noreste de Gijón. En este último sitio, se realizó sin éxito una expedición científica llamada “Proyecto Kraken”, cuyo objetivo era filmar a una de estas míticas criaturas vivas.
De momento, sólo hay un museo en Asturias, único a nivel mundial, que mantiene una exposición de varios cuerpos de calamares gigantes que han sido encontrados en la zona.
¡El coctel “baja cruda-afrodisíaco” que podría prepararse con este pequeño calamar!