Y en la sección “Mmmta, ¿y para eso hiciste tu des$%&/?”… quizás para estas horas ya estaría Rafael Caro Quintero en Estados Unidos, enfrentando cargos por el asesinato y tortura de un agente de la DEA. Peeero, no, un juez le concedió un amparo. Sin embargo, ahora el mismo juez dice “pos ahí que el asunto lo resuelva otro”.
De acuerdo con diversos medios, el juez Séptimo de Distrito de Amparo en Materia Penal con sede en Puente Grande, Jalisco, se declaró como “incompetente” para darle salida al juicio de amparo que promovió la defensa del capo sinaloense, Rafael Caro Quintero (detenido apenas la semana pasada, por si no sabían).
Con lo anterior, el juez de Puente Grande le echa la bolita a su homólogo del Estado de México. Ahhh, porque la justificación para no resolver el amparo es que, como Caro Quintero está internado en el penal del Altiplano (ubicado en el Edomex, precisamente), pues entonces a ése es al que le toca la papa caliente.
Pese a que el juez de Puente Grande se echó para atrás, esto no afecta la medida previamente tomada, la cual detuvo en seco la extradición exprés de Caro Quintero. Así que continúa la medida: el capo no puede ser mandado a Estados Unidos sin un juicio de por medio.
De acuerdo con La Jornada, si el juez del Altiplano también decide considerarse “incompetente” para resolver el amparo del Narco de Narcos, entonces el asunto sería considerado un “conflicto competencial” y tendrá que ser llevado ante un tribunal colegiado.
Lo anterior parece que tomará mucho tiempo, pero no. Según, sólo tomaría un plazo no mayor a ocho días y, listo, habría resolución del amparo.
Rafael Caro Quintero, uno de los hombres más buscados por Estados Unidos, fue detenido el pasado viernes por elementos de la Marina. Según las autoridades y AMLO, en esta detención nada tuvo que ver la DEA… bueno, quizás se trabajó con información proporcionada por dicha instancia, pero hasta ahí.
Con la detención de Caro Quintero se veía cercana su extradición a Estados Unidos, donde se le solicita para ajustar cuentas por la tortura y asesinato del agente de la DEA, Enrique Kiki Camarena. Sin embargo, la hermana del capo sinaloense metió el amparo que detuvo todo.
