Encontrar una sola definición de sexy puede ser una tarea complicada, pues no a todos nos gusta lo mismo, como dice el dicho “en gustos se rompen géneros”, o, el famoso y aclamado “si te gusta el frijol, pus vas”.
Según la RAE, sexy se define como: “que tiene atractivo físico y sexual”, pero una vez más llega el problema de: a mi me gustan rubias, a mi gordos, a mi chaparras, a mi gordibuenas, a mi esqueléticas, lampiños, pelirrojos o chinos. Por eso la ciencia a lo largo de muchos años ha intentando comprender cómo nuestro cerebro decide qué sí nos parece atractivo y que no, y, según los resultados de un nuevo estudio parece ser que no tiene mucho que ver con cuantos cuadritos tengas en el abdomen o si eres talla -6.
Según el Dr. Nikolaus Troje, de la Universidad Queen en Ontario, lo que intentaron esclarecer fue:
Muchos de los trabajos anteriores de este tipo, se enfocaban en características asiladas. Este nuevo estudio demuestra por qué es tan importante es que estas características embonen bien entre ellas.
El equipo utilizó el siguiente experimento: en un panel, a través de 15 puntos que se movían, delinearon figuras de diferentes personas y debían medir qué tan atractivos parecían; después debían medir qué movimientos les parecían más atrayentes.
Después mezclaron las figuras que fueron calificadas como más atractivas, con los movimientos igualmente más atractivos, y, aunque uno pensaría que ahí todos explotaron de amor, la imagen hibrida resultaba menos seductora, pues parecía que no correspondían una con la otra.
Para el Dr. Troje es lógico por qué pasa esto, es todo gracias a que nuestro cerebro está muy al pendiente de esta falta de correspondencia o “mismatches”, lo explica con el siguiente ejemplo:
Puede ser que decidas teñirte el cabello de rubio, pues para muchos eso es atractivo, pero si tus cejas no concuerdan, podría no funcionar pues para otras personas puede ser muy extraño. Nuestro sistema visual detecta muy fácil las mentiras y percibe incluso la más pequeña inconsistencia y reacciona negativo a ellas.
Así que el consejo es simple, y hasta un poco cursi, solo tienen que ser ustedes mismos. Si aparentan algo que no va con su físico o personalidad, estarían alejando parejas potenciales.