Y a todo eso, ¿qué es o qué cuernos hace el Plan DN-III?

Cada que suceden desastres en México, como inundaciones, tormentas, sismos o incendios escuchamos que una de las primeras tropas que se activan para tratar de alivianar la bronca son los miembros de las Fuerzas Armadas. Y lo hacen a través del famosísimo Plan DN-III —DeEneTres, para los cuates.

Sin embargo, aunque lo hemos escuchado mil veces, ¿sabemos qué es, qué hace o en qué consiste este Plan DN-III?

Para no hacerle mucho enredo, el Plan DN-III es un operativo militar, encabezado por la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) en el que participan los miembros del Ejército y de la Fuerza Aérea.

Se le conoce también —en nombre rimbombante— como el Plan de Auxilio a la Población Civil en Casos de Desastre.

Empezó a raíz de los desastres del Huracán Inés de 1966 en las costas de Tamaulipas, agarró formalidad con el Sistema de Protección Civil que se creó después del sismo de 1985 y desde entonces, lo hemos visto en acción muchísimas veces… pero, ¿cómo cuernos funciona?

Las 3 fases del Plan DN-III

Bueno, pues el Plan DN-III para que el Ejército pueda echar la mano en casos de desastre está constituido en 3 fases simples. La primera es muy poco conocida y las otras dos son las que, normalmente, hemos presenciado.

Empieza con una fase de Prevención, que es mucho más constante, siempre está activa, llena de simulacros y si la tratáramos de resumir, busca minimizar los riesgos de los desastres en México a través de actividades como:

• Reuniones con organizaciones civiles, los tres niveles de gobierno y el Sistema Nacional de Protección Civil
• Recorridos para identificar áreas vulnerables o actualizar los atlas de riesgo.
• Monitoreo de fenómenos naturales (los predecibles, obvio).
• Simulacros para verificar la organización, los equipos, el material y que toda la maquinaria se mantenga aceitada.
• Mantener en buen estado las instalaciones que se designarían como albergues y centros de acopio.

De ahí se van a la segunda fase del DN-III que se llama de Auxilio.

Esa es la más visible, pues, según la propia SEDENA está dedicada primordialmente “a salvaguardar la vida de las personas, sus bienes, preservar los servicios públicos y el medio ambiente”. Las actividades que se incluyen en esta fase son:

• Alertamiento: Avisarle a las personas de los riesgos de un desastre, pues.
• Coordinación de la Emergencia: Llevan a acabo las acciones de auxilio, transporte, evacuación y administración de refugios temporales.
• Evaluación de Daños: Identifican riesgos latentes, registran los daños y reconocen el número de vidas perdidas.
• Seguridad: Trabajan con otras organizaciones como la policía para preservar bienes y actividad económica. Evitar saqueos.
• Búsqueda, Salvamento y Asistencia: Organizan y coordinan las labores de búsqueda y rescate. Se apoya en la organización, coordinación y realización de las labores de búsqueda y rescate.
• Servicios Estratégicos, Equipamiento y Bienes: Prestan todo sus equipo de transporte y comunicación para las operaciones durante la emergencia.
• Salud: Asistencia médica con personal y materiales. Se apoya en la organización, coordinación y realización de las labores de salud, asistencia médica y saneamiento proporcionando los recursos humanos y materiales disponibles.
• Aprovisionamiento: Distribuyen bienes, productos de primera necesidad, preparan alimentos y los reparten entre la población afectada.

La tercer fase del Plan DN-III tiene que ver con lo que sucede después de la emergencia. Se llama de Recuperación y tiene que ver con reconstrucciones, mejoramientos y otras actividades para alivianar los daños ocasionados:

• Retiran escombro y lodo.
• Recuperan carreteras, puentes y otras vías terrestres de comunicación.
• Controlan puentes aéreos para llevar víveres, despensas y otros artículos de primera necesidad.
• Restablecen los servicios básicos como agua o electricidad.
• Garantizan —como policía— la seguridad en las zonas afectadas.

Bueno, esas son las fases, pero hay otras cosas que también importan mucho… y es que el Plan DN-III o las actividades que incluye dependen del desastre que esté cayendo en México.

¿Qué desastres naturales contempla el Plan DN-III?

Según la SEDENA trabajan o aplican el Plan DN-III en sucesos geológicos, hidrometeorológicos y químico-tecnológicos. En cada uno, aplican diferentes técnicas.

En los geológicos se incluyen sismos, las erupciones volcánicas, los tsunamis, la inestabilidad de laderas, derrumbes o agrietamientos.

Sobre los hidrometeorológicos se enfocan en agentes atmosféricos. Eso quiere decir que acá se preparan para ciclones tropicales, lluvias extremas, inundaciones, tormentas de nieve o granizo, heladas, sequías y tornados. 

Finalmente, los químico-tecnológicos se definen en el Plan DN-III como “acción violenta de diferentes sustancias”, particularmente algunas que tienen participación humana en los fenómenos destructivos como incendios, explosiones, fugas tóxicas, radiaciones y derrames.