Tras darse a conocer las francas intenciones de Barack Obama para atacar Siria, el presidente ruso, Vladimir Putin da su posición al respecto.
Obama y su secretario de Estado, John Kerry, han acusado al régimen sirio de ser responsables del ataque con armas químicas ocurrido el pasado 21 de junio, pero como Putin –y medio mundo- sabe cómo se las gastan los gringos, exigió que:
“Si hay pruebas sobre el uso de armas químicas, deben ser presentadas. Si no se presentan, es que no existen”.
Además apeló a la condición que Obama tiene como Premio Nobel de la Paz y le ha pedido que piense en las víctimas que habrá en caso que se realice un ataque a Siria… o quien sabe, igual y le dan otro galardón.
Por otra parte, reclamó a la ONU no hacer acto de presencia y dejar todo el paquete del conflicto a Estados Unidos: “Ceder la iniciativa aquellos que reclaman constantemente una intervención militar es una completa tontería que no responde en absoluto a ninguna lógica”.
Y para rematar, Putin hizo uso del razonamiento más básico: “antes de tomar la decisión de lanzar los ataques contra Siria, EU debería pensar en sus operaciones en distintas regiones del mundo que no han resuelto los problemas”.
Con estas declaraciones -si son de su conocimiento- seguramente Obama tiene mucho en que pensar… ojalá no sea invadir Rusia.