Prácticamente todos los capitalinos y capitalinas han visto esta glorieta de la Ciudad de México; pero, ¿alguna vez se la han imaginado con ropa interior? Pues hace algunos años le pusieron calzones a la Diana Cazadora que está en la avenida Paseo de la Reforma. Por esta razón, en esta minisección llamada Tragicomedias les queremos contar esta peculiar anécdota que pasó en la capital del país.
Como ya es una costumbre, tomamos el volumen 1 de “Tragicomedia Mexicana” de José Agustín para escarbar un poquito en la historia y contarles la vez en que le pusieron calzones a la Diana Cazadora.
Sí, sobre este hecho, el escritor mexicano nos cuenta que en 1944, quien era “la primera dama”, Ana Soledad Orozco, esposa del entonces presidente de México, Manuel Ávila Camacho, estaba empeñada en censurar películas y otras cosas que le parecían inapropiadas.
Por eso, dos años después, al enterarse de la “impúdica estatua de la Diana Cazadora”, “se horrorizó ante la suculenta desnudez de la diosa, y ordenó que se le pusiera un taparrabo”.
¿Qué pasó esa vez? Acá les contamos.
Un poquito de contexto…
Antes que nada, les damos unos cuantos datos históricos para que puedan ubicarse en tiempo y espacio. Sólo un poco de información para que tengan tantito contexto de este hecho.
- En México el presidente era Manuel Ávila Camacho (1940-1946)
- Su esposa, como ya lo mencionamos, era Ana Soledad Orozco
- El Partido de la Revolución Mexicana (PRM) estaba en el poder
- Se daba el llamado Milagro mexicano (1930-1950) caracterizado por cierta estabilidad económica
- El regente del Distrito Federal era Javier Rojo Gómez (1940-1946)
- Juan Olaguíbel, escultor mexicano y creador de la Diana Cazadora
Ahora sí… ¿en qué estábamos?
¿Cómo se creó la Diana Cazadora?
Antes que nada, les queremos decir cómo fue su creación: Según el libro “La Patria en el Paseo de la Reforma” de Carlos Martínez Assad, la idea de esta escultura, llamada oficialmente “La Flechadora de la Estrella del Norte”, fue concebida y diseñada primero por Vicente Mendiola; peeero, su realización quedó en manos del mismísimo escultor mexicano Juan Olaguíbel.
Y como ya muchos saben, quien posó para desarrollar la famosa Diana Cazadora fue la modelo Helvia Martínez; identidad que se reveló muchos años después de que se colocara en la Ciudad de México.
Según Martínez Assad, la figura encargada por el regente Javier Rojo Gómez está conformada por seis piezas de bronce fundido, mide tres metros de altura y pesa más de una tonelada.
Inaugurada el 10 de octubre de 1942, se colocó por primera vez en la entrada del Bosque de Chapultepec. Sin embargo, por las obras del Anillo Periférico, tuvo que trasladarse al Parque Ródano en 1975, donde permaneció unos 18 años.
Sería hasta 1992 que ubicarían a la Diana Cazadora en una glorieta del Paseo de la Reforma, justo a la altura de la calle Río Misisipi de la colonia Cuauhtémoc, en la alcaldía del mismo nombre.
En fin… De acuerdo con Carlos, la construcción de esta escultura tuvo un costo total de seis mil pesos en los años 40 (con ese dinero apenas si puedes comprar una televisión ahora).
¿Cuándo y por qué le pusieron calzones a la Diana Cazadora?
Carlos Martínez Assad cuenta que apenas se colocó en su pedestal, la figura de bronce, “su entera desnudez”, provocó fuertes polémicas. Tanto así que, en 1946, el escultor Juan Olaguíbel tuvo que cubrir su pubis con un calzón, presuntamente por la influencia de la esposa de Manuel Ávila Camacho.
Sí, según esta versión, “la primera dama” fue presionada por la entonces Liga de la Decencia, la cual se encargaba de prohibir las películas que se exhibían en todo el país.
Sin embargo, de acuerdo con José Agustín, fue la mismísima Ana Soledad Orozco la que pidió fotos de la escultura y se horrorizó por “la desnudez de la diosa”, por lo que ordenó que se le pusiera un taparrabo.
Pero el artista mexicano no se dejó intimidar, estaba satisfecho con su trabajo y “se hizo el loco” el mayor tiempo que pudo; aunque al final no tuvo más remedio y aceptó que le pusieran calzones a la Diana Cazadora hasta 1967.
La Diana Cazadora anduvo de un lado para otro
Ya para acabar, les contamos que la figura no siempre estuvo en Paseo de la Reforma. Así es; primero se colocó en la esquina de esta avenida y Lieja, cerca de donde ahora está la Estela de Luz (la famosa y polémica Galleta), frente a la Puerta de los Leones del Bosque de Chapultepec, donde permaneció hasta que el regente Carlos Hank González ordenó que se construyeran 350 kilómetros de ejes viales (el famoso Circuito Interior).
Por esta razón, la mandaron al Parque Ariel, en la calle Río Ródano, justo donde actualmente se encuentra la Torre Mayor. Punto en el que para muchos debía quedarse porque supuestamente no formaba parte del “discurso de quienes contribuyeron en la construcción de la nación mexicana”, cuenta Assad.
Después, en los años 80, José López Portillo mandó a construir en homenaje al Sistema Cutzamala unas fuentes en el Paseo de la Reforma, a las cuales muchos bautizaron como “las regaderas”.
Afortunadamente, en 1992, cuando Carlos Salinas de Gortari estaba en el poder, se mandaron a retirar las fuentes y se colocó en su lugar a la Diana Cazadora, en donde se encuentra hasta ahora.
¿Ustedes sabían que alguna vez le pusieron calzones a la Diana Cazadora?