Lo que necesitas saber:
¿Qué fue lo que pasó con el FONDEN? ¿de dónde sale el dinero para emergencias? Acá te contamos lo que hay que saber.
Ahora que el huracán Otis pegó con fuerza en Acapulco, estado de Guerrero, en redes sociales muchas personas se preguntan qué va a pasar con los mecanismos de ayuda para la emergencia si el Fideicomiso Fondo de Desastres Naturales (FONDEN) ya no existe.
Por acá les dejamos algunos puntos clave para entender qué fue lo que pasó con el fideicomiso y cuáles con los mecanismos que existen ahora en su lugar.
¿Qué era el FONDEN?
El Fondo de Desastres Naturales de México (FONDEN) fue creado a finales de los años 90 como un mecanismo presupuestario para poder reaccionar y ayudar con la rehabilitación de la infraestructura federal y estatal que resulte afectada por desastres naturales.
Este fideicomiso quedó con capacidad operativa en 1996 cuando se publicaron sus primeras reglas de operación. Recibía dinero a través del Presupuesto de Egresos de la Federación.
Cuando ocurría un desastre, se declaraba una emergencia y los fondos autorizados a los programas de reconstrucción eran transferidos a sub-cuentas específicas dentro del fideicomiso FONDEN para que pudieran ser usados.
La página del Gobierno de México describe el objetivo de este mecanismo como “atender los efectos de Desastres Naturales, imprevisibles, cuya magnitud supere la capacidad financiera de respuesta de la dependencias y entidades paraestatales, así como de las entidades federativas“.
¿Por qué desapareció el FONDEN?
A mediados/finales del 2020, legisladores de Morena lanzaron una iniciativa para modificar 18 leyes y darle cuello a 2 con el fin de eliminar 109 fideicomisos, entre ellos el del FONDEN.
Rapidito, como pasa con este tipo de propuestas apoyadas por el presidente, la iniciativa fue aprobada por Morena y sus aliados en ambas Cámaras del Congreso mexicano.
El 28 de julio de 2021 la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) publicó en el Diario Oficial de la Federación la eliminación del Fondo de Desastres Naturales, por lo que su desaparición quedó oficializada.
La postura del presidente Andrés Manuel López Obrador fue que el FONDEN era la “caja chica” para los funcionarios y que era manejado como mejor convenía, por lo que era necesario que desapareciera.
“Hay elementos suficientes para sostener que era una ‘caja chica’, bueno ni tan chica, para funcionarios que compraban de todo aprovechando que había una emergencia sin licitar, miles de millones de pesos en catres, láminas de zinc, en todo, a precios elevadísimos”, dijo el mandatario el 7 de octubre de 2020.
En un video publicado el 20 de octubre de 2020, el entonces secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Arturo Herrera, explicó que el FONDEN al último día de agosto tenía 4 mil 911 millones de pesos.
La cosa es que por las respuestas a huracanes anteriores y sismos de 2017 tenía deudas por 18 mil 034 millones de pesos, por lo que el saldo total del FONDEN era de -13 mil 123 millones de pesos.
“El FONDEN hoy, en términos netos, no tiene recursos, lo que tiene son deudas. Por lo tanto este fideicomiso no se trata de tomar lo que existe ahí, porque lo que existe ahí son deudas“, dijo el exfuncionario.
¿Y ahora cuál es el proceso para asignar dineros sin el FONDEN?
Lo primero que hay que decir es que con la desaparición del FONDEN tuvo que haber cambios en la forma de activar el Sistema Nacional de Protección Civil (SNPC).
En diciembre de 2020 aparecieron documentos, muchos, para que los derechos y obligaciones del FONDEN pasaran al Gobierno Federal, a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Además, los dineros que había en el FONDEN se pasaron a la Tesorería de la Federación. El gobierno afirmó que ya estaba contratando seguros y bonos catastróficos como parte de la estrategia para asegurar riesgos tan grandes.
Ahora, cuando un desastre ocurre, el estado solicita la declaratoria de emergencia al gobierno federal.
La Coordinación Nacional de Protección Civil emite la declaratoria de emergencia y saca la calculadora para saber cuántas personas resultaron afectadas.
Luego el estado pide al Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades de la Secretaría de Salud todo lo relacionado con la salud y le piden a Protección Civil materiales de abrigo, protección, herramienta y equipo.
El Ejército, la Marina o la Guardia Nacional serán los canalizadores para entregar los insumos a la población. Este gráfico, por ejemplo, muestra que el 2017 y el 2010 fueron los años más costosos por los desastres que ocurrieron.
Además, son seguros y bonos catastróficos de pérdidas los que responderían para soltar los dineros.
Las críticas por la desaparición del FONDEN
Un análisis sobre el sistema de seguros y el financiamiento de riesgos en México, elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en nuestro país, señala que tras la desaparición del FONDEN, el gobierno compró un seguro de daños ocasionados por desastres naturales que ofrece cobertura por hasta 5 mil millones de pesos.
Se activa ante desastres naturales que superen un nivel mínimo de daños de 275 millones de pesos.
Además, emitió un bono catastrófico de pérdidas derivadas de sismos y ciclones tropicales, a través del Banco Mundial, que cubre los riesgos asociados a desastres por un monto equivalente a 485 millones de dólares, por un plazo de 4 años.
“La desaparición del FONDEN generó una limitación importante, pues en la actualidad no existe, como tal, un programa presupuestario que asigne recursos preventivos para la atención de desastres de cualquier tipo“, se lee en el informe.
Es decir, si un desastre provoca un riesgo en alimentación, pérdidas económicas de la población, de la industria, de los empleos, de la salud o que implique apoyos para reconstrucción, remoción escombros, aplicación de protocolos sanitarios, traslado y destino final de los desechos, así como la rehabilitación de vías de comunicación y otras para retomar la normalidad, “los mecanismos actuales resultarían insuficientes ya que asignan recursos extraordinarios para a la atención de desastres“.
“Asimismo, los sistemas actuales —a diferencia de los previos— no brindan claridad del mecanismo de operación y el alcance de sus coberturas hacia las personas en caso de siniestro“, se lee.
¿Cuánto dinero hay para las emergencias?
Este 25 de octubre se llevó a cabo la comparecencia del subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio González, en el Senado. Y claro, una de las preguntas estuvo relacionada con el FONDEN.
El funcionario afirmó que actualmente el FONDEN tiene 18 mil millones de pesos, una línea presupuestal de 10 mil millones de pesos, 5 mil millones de pesos de seguros catastróficos que se contratan cada año y 485 millones de dólares de bono catastrófico.
El funcionario explica que ahora, con lo que se eliminó, lo que se hace es que ya no es Banobras y los municipios quienes establecen el sistema de facturas sobre los proyectos de recuperación, sino que todo se centraliza y se mandan los recursos a los ejecutores que “pudiera ser la SEDENA si activa el Plan DN-III o cualquier estado“.