Conseguir una prueba de COVID en los últimos días ha sido tarea titánica, sobre todo en la Ciudad de México. Entre que los laboratorios no se dan abasto, las filas en las farmacias dan la vuelta a la cuadra y las pruebas gratuitas del gobierno chilango han resultado insuficientes —se acaban las fichas en cuestión de minutos—, pues la cosa está complicada. Así es como llegó la alcaldía Benito Juárez a intentar ayudar en la identificación de casos.
Nomás que lo hicieron con las pat… digo, con polémica.
Resulta que la Benito Juárez ha resultado muy criticada por poner más pruebas de COVID al alcance de sus habitantes, nomás que decidieron cobrarlas… y no crean que le están haciendo mucho descuento.
De acuerdo con su anuncio, la tradicional alcaldía panista en el corazón de la CDMX empezará a hacer pruebas rápidas de lunes a domingo a partir de las 8 de la mañana y bajando la cortina a la 1 de la tarde. Hay de dos sopas: pueden ser pruebas de sangre o nasofaríngeas.
Dependiendo cuál quieran, el precio está entre los 310 pesos o los 320 pesos.
Aunque los precios de venta de pruebas COVID están relativamente parejos con otros negocios de la zona —dependiendo la farmacia o el laboratorio, andan entre 250 o 400 pesos—, la situación terminó siendo bastante polémica en las redes sociales cuando empezaron a meterle el clásico sazón de grilla política.
Como el diputado local, Christian von Roehrich, en su cuenta de Twitter.
“Ante la escasez de pruebas covid proporcionadas por el Gobierno de la CDMX, una vez más, la alcaldía Benito Juárez hace la diferencia”, escribió el panista.
En fin, así están la cosas en la política chilanga. Lo que si alguien quiere entrarle, al ya saben de un lugar más donde se están haciendo pruebas, aunque las andan vendiendo.
Como se ha mostrado en los anuncios, estas pruebas de COVID en la Benito Juárez se están haciendo en conjunto con la organización Atención Especializada de Médicos y Enfermeras en el Hogar (AEMEH) y están en un quiosco de la explanada de la alcaldía.