“¿Ahhh, si? Pues vamos a acabar con los glaciares para que esto no vuelva a ocurrir”, dice Trump y los otros güeyes que no creen en el cambio climático.

Captura de pantalla

Pero, a decir verdad, cuidarnos del cambio climático sería lo que nos salvaría de una nueva gran pandemia, según lo que advierten especialistas dedicados al análisis de lagos del Ártico. De acuerdo con estos, la materia que se desprende tras el derretimiento del hielo de la región hace prever que la cosa se puede poner fea.

Aunque el gran miedo sería que del hielo nos salga un pin$%&e Sasquatch o un viejito que se congeló para vivir y disfrutar las maravillas del futuro, lo que los mencionados especialistas han hallado son riesgos de propagación viral: virus que se mantenían congelados y que, tras el deshielo, podrían volver a andar en circulación.

Un ejemplo de lo anterior se vio en 2016, cuando una ola de calor en el norte de Siberia provocó el derretimiento del permafrost (la capa del suelo que, en teoría, debería estar permanentemente congelada) y, con ello, la exposición de un reno infectado con ántrax. El cadáver del animal infectó a ocho personas, una de ellas un menor que lamentablemente murió.

Los encargados de advertir los peligros del derretimiento de los glaciares son investigadores de la Universidad de Ottawa, en Canadá. Liderados por el Dr. Stéphane Aris-Brosou,  el grupo ha recolectado muestras de suelo y sedimentos del lago Hazen, en Canadá de donde fluían pequeñas, medianas y grandes cantidades de agua de deshielo de los glaciares locales.

El análisis de las muestras ha llevado a sugerir que el riesgo de propagación viral, donde un virus infecta a un nuevo huésped por primera vez, puede ser mayor cerca del derretimiento de los glaciares.

Foto ilustrativa: Pexels.

En el estudio publicado en Proceedings of the Royal Society B (citado por The Guardian), los investigadores canadienses señalan que hay riesgo de propagación de virus en lugares cercanos a donde fluyeron grandes cantidades de agua de deshielo glacial… y claro, entonces esa situación se volvería más común de continuar el calentamiento global.

Lo peor del asunto es que muy posiblemente varios de los virus que se liberen con el derretimiento de los glaciares sean desconocidos por la humanidad. 

Imagen de 1911 de una expedición en la Antártida / Foto: Getty Images

De hecho, en otra investigación realizada por científicos de Estados Unidos, se hallaron 33 tipos de virus en muestras de hielo  tomadas de en una meseta de China.

De esos virus, 28 eran nuevos y algunos tenían hasta 15 mil años de antigüedad. Así que una nueva (y urgente) investigación tendría por objetivo ir clasificando los posibles virus que se desprenderían de los glaciares y, sobre todo, detectar su potencial pandémico. Digo, para irnos preparando

Todo lo que no sabías que necesitas saber lo encuentras en Sopitas.com

Comentarios