Si a muchos les da ñañaras estar en un lugar en el que una persona no trae cubrebocas… ahora imagínense que esa persona fue diagnosticada con COVID-19. Pues eso es puo haber pasado con el director de producción y programación de Canal del Congreso.
Según reportó la periodista Leti Robles de la Rosa, el mencionado director (identificado como Juan Carlos Becerra) se presentó a trabajar el pasado 1 de septiembre, acá, bien chiles… valiéndole poco que apenas unos días antes (el 28 de agosto, para ser exactos) su prueba COVID-19 fue positiva…
De acuerdo con la periodista que cubre toda la información que entra y sale del Senado de la República, aparte de ir a chambear sabiendo que muy probablemente continuaba siendo positivo a la enfermedad, el susodicho anduvo de aquí para allá, saludando y tomándose fotos con todo mundo… ¡sin cubrebocas! Fue un foco de contagios ambulante, pues.
“La información que he podido recabar con los propios trabajadores del Canal es que a pesar de que varios de ellos le pidieron que se retirara, porque sabían que tenía COVID-19, no lo hizo e incluso en una discusión hasta escupió a uno de ellos”, señaló Robles de la Rosa en sus redes sociales.
Ante las acusaciones de la periodista, el Canal del Congreso salió con un breve mensaje… obviamente para defender a Juan Carlos Becerra. Pos qué otra cosa iba a ser.
El Canal del Congreso aceptó que, efectivamente, el director de producción y programación se presentó a trabajar en sus instalaciones el 1 de septiembre… ya que ese día hubo sesión del Congreso General. Según el medio del Estado, Becerra (y el resto del equipo que laboró) presentó su respectiva prueba COVID-19 (negativa, claro).
“Desde el Canal Congreso tenemos claro que la salud es una prioridad insustituible”, se agrega en el mensaje.
Respecto a las fotos en las que Becerra aparece sin cubrebocas, el Canal del Congreso aclaró que fueron tomadas en el momento que éste se encontraba comiendo… y ya, así es como rechazan toda la información de Robles de la Rosa.
“Lamentamos que esa acción, realizada por todos los colaboradores que ese día también comieron en cabina y en sus lugares de transmisión, con la certeza de que no tenían COVID-19, haya puesto en duda el compromiso que tenemos con cuidar la salud de todos nuestros colaboradores”, concluye el medio.
Mientras que Leti Robles de la Rosa señala que es bien sabido entre los trabajadores del Canal del Congreso que Becerra dio positivo apenas el 28 de agosto, el medio del Estado no mostró evidencia que pruebe que, efectivamente, el funcionario ya estaba libre de COVID el día que se presentó a trabajar… digo, una imagen de la prueba no hubiera estado de más.
Ir por la vida sabiendo que puede contagiar es delito
Este caso da para recordar que no nomás es de “mehhh, me siento chido… sí voy a trabajar”. De acuerdo con el artículo 199-Bis del Código Penal Federal…
“El que a sabiendas de que está enfermo de un mal venéreo u otra enfermedad grave en período infectante, ponga en peligro de contagio la salud de otro, por relaciones sexuales u otro medio transmisible, será sancionado de tres días a tres años de prisión y hasta cuarenta días de multa“…
