El ex city manager de la Miguel Hidalgo y actual líder del grupo de cábulas que tiene ciscados a los políticos que no quieren devolver su nada merecido bono navideño, Arne aus den Ruthen, tendrá que vérselas con la justicia, luego de su artero ataque contra la sede nacional del PRI.
El Comité Ejecutivo Nacional del hasta ayer impoluto (físicamente) partido, anunció que el buen Arne será demandado penalmente por los delitos de pandillerismo y asociación delictuosa, esto porque les dejó toda batida la fachada de su sede central, al realizar el llamado “Pañalazo”. Por si estaban entretenidos con las llamadas entre EPN y Trump y no saben de qué les estamos hablando, para eso quedó tan escatológica protesta registrada en los anales cibernéticos de la historia. Aquí la tienen:
El #pañalazo a los amos de la corrupción y el mal gobierno: @PRI_Nacional https://t.co/93rbqcu2wY
— Arne aus den Ruthen (@arnemx) 2 de febrero de 2017
Si bien anteriormente Arne se había lanzado con jitomates contra su líder nacional, César Camacho, el PRI denuncia que “ahora movilizó a un grupo de personas para agredir, denigrar y poner en riesgo la seguridad de quienes trabajamos en la sede nacional del PRI, sin que el Gobierno de la Ciudad de México y la delegación Cuauhtémoc hayan tomado medidas preventivas”.
A través de un comunicado, el tricolor advirtió que la pena que podría recibir el ex city manager sería de cuatro hasta ocho años de prisión, esto de acuerdo a los artículos 252 y 253 del Código Penal de la Ciudad de México. Como pruebas de los agravios recibidos, el PRI apunta las publicaciones que Arne realizó en las redes sociales, en las que se le ve dirigiendo el ataque con pañales.
El @PRI_Nacional recibió sus primeros 1,000 @PanalZurrado como muestra de repudio. #Pañalazo #DiaperAttackhttps://t.co/yajGhAjQt8 pic.twitter.com/XpHXGJRxAX
— Arne aus den Ruthen (@arnemx) 3 de febrero de 2017
“Ahí se aprecia cómo el ex city manager de la delegación Miguel Hidalgo coordina a alrededor de 40 personas para lanzar diversos objetos contra nuestras instalaciones”.
Además de condenar la forma tan manchada en que Arne y su gente protestaron, el PRI denuncia que las autoridades capitalinas brillaron por su ausencia, lo cual fue una “omisión” en su labor de “garantizar la seguridad de las mujeres y hombres que trabajamos en el PRI”.
En el “pañalazo” participaron cerca de 20 brigadas con 50 “tiros”. Desde la explanada de la Delegación Cuauhtémoc aventaron los pañales (previamente utilizados) contra el inmueble priista: “Les estamos devolviendo la mierda que le dan al gobierno y al país; es mierda que dan con su corrupción y su impunidad”, comentó Arne en video difundido vía Periscope.
