Así de majadero es el dinero que se le dará a los partidos para 2018, que hasta los nada austeros miembros de la iglesia católica se persignaron mientras exclamaban ¡Ave María Purísima! y, en la tradicional editorial del semanario Desde la Fe, calificaron a esos más de 7 mil millones de pesos que se embolsarán como un “abuso escandaloso y moral” (pero no hay tanta bronca si se mochan con la charola de las limosnas).
“¡Sólo esto nos faltaba! En medio de un panorama de incertidumbre e inflación, con bajo crecimiento de la economía nacional, el Instituto Nacional Electoral (INE) ha dado a conocer el presupuesto que los partidos políticos estarán gozando para el proceso electoral 2017-2018, bajo el eufemístico nombre de financiamiento público”, señala el texto, en el que se recuerda que por las disposiciones electorales se da otra rebanadota para los partidos a nivel local. Entonces, la suma se eleva a más de 13 mil millones de pesos.
La Arquidiócesis pone énfasis en que, aunque los consejeros electorales del INE aseguran que el dinero sirve para propiciar condiciones de equidad y autonomía de los partidos (o sea, que no tengan que buscar dinero ilegal), ni eso justifica que el presupuesto sea superior a que reciben programas de desarrollo social. “Por ejemplo, el fomento a la economía social ha sufrido progresivos recortes (…) o bien, el programa de empleo temporal de la Secretaría de Desarrollo Social, mismo que fue muy castigado al ser asignados sólo 723 millones de pesos en el Presupuesto de Egresos 2017”.
Pero bueno, por mucho coraje que hagan, los de sotana –al igual que muchos de nosotros– ya saben lo que vendrá: los diputados (encargados de aprobar los recursos) le aplicarán tijera al dinero asignado a otros ramos, pero dejarán intacto al presupuesto de la partidocracia. “Esto demuestra cómo la cínica Reforma Electoral sólo fue bondadosa en apariencia”.
Además de muchos “Padre Nuestro” y de que los políticos se purifiquen echándose mil veces el “Yo Pecador”, la arquidiócesis apunta que ya “es hora de que la sociedad civil ponga un límite a este escandaloso, inmoral e injusto abuso de los partidos políticos”.
Y bueno, precisamente uno de los políticos salidos de la sociedad civil, Pedro Kumamoto, quien hace tiempo hizo una propuesta para recortar el gasto de los partidos, pidió que ésta sea defendida por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) porque, como era de esperarse, se corre el peligro de que #SinVotoNoHayDinero sea invalidada.
Hoy en @Reforma aparece que la validez de #SinVotoNoHayDinero sería votada el lunes en la Suprema Corte 1/5
— Pedro Kumamoto (@pkumamoto) 26 de agosto de 2017
Los partidos políticos activaron su maquinaria jurídicas para defender lo indefendible: seguir gastando el dinero indiscriminadamente. 2/5
— Pedro Kumamoto (@pkumamoto) 26 de agosto de 2017
Confiamos en que las y los ministros de la SCJN van a estar del lado correcto de la historia, el de las personas y la justicia 3/5
— Pedro Kumamoto (@pkumamoto) 26 de agosto de 2017
En propuesta del ministro Jorge Pardo, la iniciativa de Kumamoto (aprobada en el Congreso de Jalisco hace unos meses) viola las bases previstas en el Artículo 116 de la Constitución federal y en el artículo 51 de la Ley General de Partidos Políticos. Además, según las cuentas de Pardo, lo que hace la reforma aprobada es aumentar el gasto, ya que crea bolsas de recursos separadas para partidos nacionales y locales.
La votación para invalidar #SinVotoNoHayDinero se prevé, será realizada este lunes. Para que avance su anulación y se regrese al viejo esquema de otorgación de presupuesto para los partidos, será necesario el voto a favor de ocho de los 11 ministros de la SCJN.