Según los afectados, el pasado 6 de noviembre, Aeroméxico negó el abordaje a un avión que se dirigía a Hermosillo a seis indígenas provenientes de Sola de Vega y San Jacinto Toltepec, localidades de Oaxaca. Esto, por su forma de vestir.
Francisco Césares Andrade, supervisor regional de Aeroméxico en Oaxaca, explicó en un principio:
“Fue la empleada de mostrador Sandra Mónica Ramírez la que negó el abordaje a José Rojas, Florentino Bautista, Severiana López, Gilberto Ruiz, Benedicto Heras, Marcelo Pérez y Bartolo Pérez.”
La primera acusación formal llegó por parte de la agencia de viajes Reforma, cuyas agentes Sofía Santana y Neftalí Bautista confirmaron las acusaciones a Aeroméxico y argumentaron en favor de los indígenas. Explicaron, además, que tras exigir el reembolso de sus boletos, éste les fue negado.
Los boletos fueron comprados el 28 de octubre para usarse el 6 de noviembre en los vuelos 544 y 706 con escala en la Ciudad México por siete individuos, de los cuáles sólo uno pudo abordar exitosamente.
Tras las advertencias de los indígenas a la aerolínea de acudir a la Defensoría de los Derechos Humanos, la aerolínea emitió el 10 de noviembre un comunicado en el que explicaba que, debido a un imprevisto cambio de avión para uno de los vuelos, algunos clientes no podrían abordarlo. En efecto, el viaje sería hecho en un Embarer 170 de 76 asientos, pero se realizó en un Embarer 190 de 99 lugares. Por este motivo, más de 20 clientes perdieron su vuelo.
Según Aeroméxico, el supervisor en turno explicó la situación a los pasajeros y ofreció hotel, alimentos y traslado en compensación por las molestias, más un boleto de avión en ruta nacional.
“Es importante señalar que una persona del grupo anteriormente mencionado tomó el vuelo sin problema alguno, el resto lo hizo el 7 de noviembre a petición de los pasajeros pues deseaban volar juntos; cubriéndoles hospedaje y alimentos durante estos días. De tal modo que el personal de la aerolínea en el aeropuerto actuó de acuerdo a los procedimientos operativos y de atención al cliente. Aeroméxico lamenta los inconvenientes que ocasionó esta situación y agradece la preferencia de todos sus clientes”.
Según medios locales, cuando los 6 pasajeros preguntaron por qué se les impedía el paso, se les contestó “háganle como quieran.”
Vía: El Economista, Proceso
