La Ciudad de México se encuentra expuesta a una nueva catástrofe. Desafortunadamente, las lecciones que nos dejaron los terremotos de septiembre del año pasado ya se están olvidando. La mayoría de las personas no tienen las herramientas adecuadas para saber si el edificio de la escuela a la que van sus hijos, las oficinas en las que trabajan, el departamento que recién compró, la casa que renta o el sitio al que acude para hacer un trámite se derrumbará en cualquier momento.

La negligencia y la corrupción juegan un papel fundamental a la hora de provocar catástrofes en las construcciones. Así se informa en la investigación de Mexicanos contra la Corrupción: ‘¿Por qué se cayó mi edificio?’. En ella, se muestran los casos de 28 inmuebles que se derrumbaron por el “descuido apropósito” de alguien que se embolsó una buena cantidad de dinero.

Hay diferentes puntos que se ignoran a la hora de construir en CDMX:

  • El Reglamento de Construcciones

En muchas de las ocasiones, los cálculos de ingeniería de un inmueble son modificados para aumentar las ganancias de las constructoras. Eso sin mencionar que los inmuebles son levantados con materiales insuficientes o de muy mala calidad pa’ ahorrar unos centavos. 

Muchos de los cimientos son viejos, pero que en su momento se vendieron como departamentos nuevos.

  • Directores Responsables de Obra 

Se explica que en ciertos casos, los Directores Responsables de Obra (DRO) tienen un conflicto de interés al ser contratados por las inmobiliarias.

Foto: Vivanuncios

Por lo anterior, los documentos y planos que se ocupan para obtener permisos no se revisan, sólo se firman sin considerar la autenticidad de la información que se presenta. En varios de los edificios alrededor de la ciudad aparecen nombres relacionados con autoridades del gobierno local, a tal grado que podríamos mencionar a familiares de Simón Neumann, ex titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) y Fernando Méndez Bernal, ex presidente del Colegio de Arquitectos -entidad que certifica a los DRO- y ahora asesor del director de Seduvi.

  • Denuncias ignoradas

En múltiples ocasiones, las autoridades ignoraron así nomás a los vecinos que ya habían acudido a denunciar los inmuebles que estaban violando los usos de suelo, construcciones que fueron levantados sin permisos, etc. 

Incluso edificios que ya tenían daños importantes desde el sismo de 1985 y sólo habían sido reconstruidos superficialmente para venderlos como departamentos.

Foto: Milenio

Para hacerlos pasar como legales de utilizaron documentos falsos, con información que no corresponde a lo que se construye. Hay que agregarle que las autoridades firmaron y otorgaron permisos sin siquiera revisar los planos o estudios de suelo.

Peor tantito, aunque los revisaran, muchos ni siquiera tienen los conocimientos para hacer una evaluación correcta. 

  • Documentos fantasma

Tal como pasó en el caso del Colegio Rébsamen, los planos, memorias de cálculo, mecánicas de suelo, manifestaciones de construcción, etc. son documentos que de pronto no aparecen en los archivos delegacionales.

Y si aparecen, están incompletos o son un verdadero caos.


La investigación 

Se trata de una investigación a fondo en el papeleo que existe -o no- en la construcción de 28 inmuebles.

En un primer momento se recibieron datos de 200 inmuebles, que se complementaron con recorridos, información recopilada por ingenieros de la UNAM y así como de la Plataforma CDMX del gobierno de la Ciudad de México.

Finalmente, se construyó una base de datos con 363 registros, de los cuales se eligieron 28 con respecto a su nivel de daño, ubicación y año de construcción.


Entre las empresas involucradas están Vertical Homes, Canada Building Systems de México, Promotora e Inmobiliaria Dekah, Vívelo en Eje Central 526, Elite Apartments, Inmobiliaria Sacomo, Lonai Group Property Services, Inmobiliaria Álvaro Obregón, Helicópteros de Puebla y HIP HABITAT.

Entre los casos se encuentra la Calle del Puente 22 en el Tecnológico de Monterrey; en la colonia Los Girasoles los edificios de Rancho del Arco 32, Miramontes 2990, 2998, 3010, 3032 y 3040; el ubicado en Saratoga 714 de la colonia Portales Sur; el inmueble de Sonora 149 de la colonia Hipódromo; Bretaña 90 en la colonia Zacahuitzco; el de Ámsterdam 107 de la colonia Hipódromo, y Edimburgo 4 de la colonia Del Valle Centro.

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