Ante el peligro de que no se instalen 5 mil 42 casillas en Oaxaca, porque no existen las condiciones de seguridad (que tendría que garantizar el gobierno del estado, encabezado por Gabino Cué) y con el descontento de la ciudadanía ante la escasez de gasolina, el gobierno federal implementa un operativo armado en la entidad, según informó en un comunicado la Secretaría de Gobernación.
El Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova Vianello (sí, el mismo de la desafortunada burla telefónica) ya reconoció que si no hay condiciones, no serán instaladas 5 mil 42 casillas en Oaxaca, donde el saldo es de tres candidatos muertos.
Recordemos que, desde hace unos días, la Sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) ha realizado diversas actividades como parte de su boicot en contra del proceso electoral del domingo 7 de junio, como vandalizar las oficinas del PRI en Oaxaca. Además, tienen tomadas las instalaciones de Pemex y las oficinas distritales del INE donde quemaron los materiales electorales e incluso los propios militares fueron desalojados por presuntos maestros.
Mientras tanto, las calles de Oaxaca se están quedando sin autos y sin transporte público por la falta de combustible, en la capital no hay una gota de gasolina.
Los ciudadanos y hasta los gasolineros han tenido que pagar fletes particulares para transportar el combustible, incluso hay gente que llega con tinacos a las estaciones de gas para llenarlos en caso de que prevalezca esta situación caótica, lo cual representa un peligro evidente para los habitantes del estado.
La coyuntura es tan crítica que algunos oaxaqueños realizan compras de pánico de alimentos y combustible como si estuviesen en un estado de emergencia. Como en Oaxaca no habrá elección de nuevo gobernador, la ciudadanía pide la promoción de un juicio político para revocar el mandato de Gabino Cué Monteagudo. Esto, bajo el argumento de que la falta de acciones claras durante su gestión, ponen en peligro la integridad de los que viven en Oaxaca.
El de Oaxaca es un gobierno débil, con la pasividad de Gabino Cué y las protestas de la CNTE, lo único que se ha logrado es el repudio de la opinión pública, al afectar directamente a la ciudadanía, debido a estas protestas hay un millón 300 mil niños sin clases y 23 mil comercios cerrados en Oaxaca. Y, ante el rumor de que estas acciones desestabilizadoras no sean únicamente convocadas por la CNTE sino por el EPR, se ha tenido que recurrir al uso de las fuerzas federales.
Por medio de un boletín firmado por el secretario de Gobernación, se dio a conocer que la respuesta del gobierno federal es implementar un operativo en el que participan elementos del Ejército Mexicano, de la Marina Armada de México y de la Policía Federal, el periódico Reforma indica que son 9 mil soldados, 6 mil policías y 3 mil marinos, que tienen como objetivo garantizar que los ciudadanos puedan salir a votar ante la gravedad en la disfunción de la seguridad estatal, con las consecuencias que eso implica.