Lo que parece ser un inocente abrazo de alumno a profesora, causó la baja del pupilo.
En los Estados Unidos no perdonan el mínimo conato de acoso sexual, por lo que en un colegio de Georgia se consideró como violación a las normas de las escuelas públicas del condado, el que Sam McNair –de 17 años- le diera un abracito a su maestra, por lo que fue suspendido de la institución educativa a la que pertenecía.
Además del video con el que se comprueba el leve arrimón que el jovenzuelo le dio a su profesora, se consideraron los testimonios de algunos testigos, así como el expediente disciplinario de McNair, el cual no le favorece mucho, ya que con anterioridad había sido expulsado de otra escuela, aunque no por acoso sexual.
De acuerdo con el ex alumno, lo que hizo con la maestra sólo fue una muestra de cariño y lo definió como un “gesto inocente”, aunque en la grabación la que recibe el abrazo tuvo como primera reacción resistir el contacto. “Uno nunca sabe por lo que otro puede estar pasando. Un abrazo te puede ayudar”, comentó el adolescente.
Sumado a lo captado en video por las cámaras de seguridad, la escuela a la que pertenecía McNair alega que uno de los principales motivos por los que fue suspendido el joven alumno fue el beso que aparentemente que le dio en el cuello a la profesora, la cual ya había pedido en repetidas ocasiones que no lo hiciera.
En lo que se trata de resolver el asunto por las vías convencionales, la madre del menor ha hecho una petición vía change.org para solicitar a la escuela que revoque el castigo contra su hijo, ya que de no hacerlo no podrá graduarse esta primavera. Hasta el momento lleva 3 mil firmas.
