Pues si tantas chavas le han sacado jugo a su castidad, este chavo no quiere desaprovechar su pureza y se pone a la venta para que una chica muy urgida pueda presumir que este año estrenó algo más que ropa.
Directamente desde Rumania, Sorin Georgian Salinievici vende su virginidad a la mejor postora… algo que parece un tanto difícil, ya que por su tesorito el joven de 24 años pide como mínimo 2 mil euros.
“He leído acerca de chicas que hacen esto y pensé que si ellas pueden, yo también puedo”, explicó el semental, quien en su anunció no hace gran cosa para hacer salivar a las féminas, ya que no ofrece medidas ni describe si posee alguna habilidad que lo haga más antojable… eso sí, aclara que aquella que se encargue de desquintarlo tiene que cumplir ciertas características:
“En cuanto a su apariencia, la mujer que compre mi virginidad tiene que ser decente. No estoy diciendo que tiene que ser muy bonita, pero si verse normal y bonita, una persona honesta”.
Por el momento parece que Sorin sólo se ofrece al mercado local, ya que sólo en postes y tiendas de conveniencia pueden ser vistos los anuncios en los que aparece su foto con la leyenda “Estoy vendiendo mi virginidad”… y su número de teléfono. Si tienen saldo suficiente y dominan el rumano, bien podrían cabulearlo hacerle una oferta.
Seguro muchas damas ya están más que interesadas en echarse al plato a este espécimen… pero les surge la duda ¿y cómo se puede comprobar que realmente es virgen? Duda razonable, la cual puede resolverse gracias al muy confiable testimonio del amigo de Sorin, Vasile Han:
“Él ha tenido parejas, pero no ha encontrado a una con la que quiera tener sexo (…) Toma el sexo muy en serio y cree fuertemente que debe guardarse para la persona correcta”…
Previendo que las ofertas no le lloverán, Sorin también apela a la generosidad de muchos hombres… seguro muchos conocen a alguna dama desatendida: “podría ser un bonito regalo en el Día Internacional de la Mujer, el 8 de marzo”, sugiere el ForeverAlone.
Pues parece que ni en rifa.