El 5 de febrero, en Coatzacoalcos, Veracruz, fue secuestrado el reportero Gregorio Jiménez de la Cruz, tras dejar a sus hijos en la escuela. Desde 2010, en esa ciudad han sido asesinados 9 periodistas y 4 más están desaparecidos. Pese a la protesta que hemos sostenido dentro y fuera de las redes todos los ciudadanos y organizaciones para exigir a las autoridades competentes que pongan fin a la violencia contra la libertad de expresión, el gobierno federal sigue sin crear un plan específico para atender este urgente problema.
Gregorio Jiménez de la Cruz, reportero de los periódicos NotiSur y Liberal del Sur, fue secuestrado en su casa en Coatzacoalcos, Veracruz este miércoles cerca de las 7:15 horas. Los directivos de NotiSUR expresaron:
“Gregorio (quien cubre la fuente policiaca) es un periodista honesto y trabajador, como está plenamente acreditado con su línea de conducta y podemos atestiguar todos quienes le conocemos”
Este fin de semana, el gobernador del estado, Javier Duarte Ochoa mantuvo una entrevista con la familia del reportero. En mandatario ofreció “toda disponibilidad para encontrar al comunicador”. Frente a la incapacidad para cumplir con esta oferta en los 5 días que han transcurrido desde el día del secuestro, el gobernador terminó por ofrecer una casa a la familia.
La esposa del reportero, por supuesto, rechazó este ofrecimiento y afirmó que lo único que deseaba era ver a su marido sano y salvo cuanto antes. Los asistentes a la reunión, Erick Lagos, el Procurador, Amadeo Flores, así como la vocera del gobierno de Veracruz, Gina Domínguez, se miraron unos a otros, apenados, según comentaron amigos reporteros del comuncador. Más tarde, cuando el gobierno del estado difundió una nota del encuentro, las autoridades no dijeron una sola palabra sobre el ofrecimiento de la nueva vivienda y menos aún sobre la exigencia de esta mujer.
Por su parte, distintas organizaciones de periodistas han levantado su voz para exigir a todas la esferas de gobierno que encuentren a su colega y que diseñen una estrategia específica para resolver el problema de las agresiones a reporteros a nivel nacional.
El día de ayer, periodistas de Xalapa protestaron en el Centro Histórico, frente al Palacio de Gobierno. A la marcha en Xalapa se sumaron integrantes del Colectivo por la Paz, así como Rubén Figueroa, integrante del Movimiento Migrante Mesoamericano, quién afirmó conocer al periodista por su coberturas de secuestros de migrantes en la región.
En el sur del estado, periodistas de Acayucan salieron a marchar para exigir a la Secretaría de Seguridad Pública y a la Fiscalía de Veracruz que intensifiquen la la búsqueda de Gregorio Jimnénez. pero fueron reprimidos por policías estatales que arrebataron sus mantas y amenazaron con golpearlos. Bien ahí: reprimir periodistas que exigen una investigación por un colega secuestrado, son unos genios.
Según Proceso:
“la Unión de Periodistas de Acayucan A.C. emitió un comunicado en el cual rechaza enérgicamente las agresiones sufridas por elementos de la Delegación Regional número XI de la SSP, además de que le quitaron un vehículo al reportero Jorge Cárdenas Romero, así como agresiones físicas al comunicador Arturo Armenta Pacheco.”
El comunicado rezaba así:
“Consideramos el hecho como un acto de represión total hacia los comunicadores de Acayucan en respuesta a la exigencia de la salida de Arturo Bermúdez Zurita como secretario de Seguridad Pública del estado por la falta de resultados que su dependencia ha mostrado en favor de la tranquilidad de los veracruzanos y en especial el de los periodistas que se han visto agredidos en varias ocasiones”.
Así mismo, reporteros de Coatzacoalcos elaboraron un video para que fuese lanzado en redes sociales y presas de todo el mundo para exigir la aparición de Jiménez Cruz:
A estas protestas se han sumado las de aquellos cuyos seres queridos desaparecieron sin haber recibido una investigación satisfactoria por parte de las autoridades. Más de cien personas marcharon en el Puerto de Veracruz marcharon para exigir respuesta sobre la desaparición de 13 personas en la entidad.
Las autoridades no pueden seguir ignorando la agresiones contra la libertad de expresión. Exigimos a los gobiernos de todas los niveles crear una estrategia integral y específica para atender este creciente problema en el país.
Pongamos fin a la violencia contra la libertad de expresión: #HastaQueAparezcaGoyo
