Ya estamos en 2016, pero eso no impide que existan comportamientos que son dignos de 1906.
Todo ocurrió en el municipio de Dzilam González en Yucatán, donde el alcalde priista José Concepción Martín Heredia decidió que iba a despedir a la policía tercera Reyna Victoria Torres Campos.
Una acción así de injusta fue enmarcada por la ironía, ya que el despido se llevó a cabo el 8 de marzo; Día Internacional de la Mujer.
La razón, como ya lo leyeron en el título, es que estaba embarazada, pero para desgracia de la humanidad; estas personas detallaron todo con estas palabras:
“El ayuntamiento no es una empresa para pagar servicios de salud como el embarazo, meses de gestación y lactancia”.
Fue así como Martín Heredia procedió con el despido.
Algunos de los regidores intentaron dialogar sobre la decisión, pero los funcionaros simplemente dijeron “son órdenes directas del alcalde”.
¿Necesitan más ironía? Además de haber sido el Día Internacional de la Mujer, el pasado martes se aprobó en el congreso local la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia en materia de bienestar obstétrico.
Todo esto sirve para que no olvidemos que México sigue siendo un país donde la inequidad, discriminación y maltrato hacia la mujer, es cosa de todos los días.
