Casual… vas por la calle y un hombre se te acerca para ofrecerte a la venta un cerebro humano.
David Charles de Indianápolis admitió ante las autoridades policíacas de su localidad, haber acudido por lo menos seis veces el año pasado en el Indiana Medical History Museum y no precisamente a admirar las instalaciones, sino a robar jarros que contenían muestras humanas, incluyendo cerebros humanos.
Y sí… los cerebros que tenía en su poder eran de gente que fue alguna vez paciente del hospital central del estado y estuvieron de acuerdo en donar su cuerpo a la ciencia para la creación de dicho museo, el cual fue concebido hace 168 años también como un centro de tratamiento psiquiátrico.
Aunque no se habían percatado de la ausencia del material robado, los funcionarios del lugar fueron alertados por un hombre que compró vía internet seis tinajas con puro material cerebral, para después darse cuenta que habían sido tomados del museo.
Charles David fue arrestado el 16 de diciembre, después de acordar la venta de más tejidos humanos con un agente encubierto, el cual se disponía a comprarle 48 frascos con tejidos humanos.
Si desean conocer más de este perturbado hombre, aunque con un nombre más que genial para delinquir, espérense a la conferencia de prensa que será realizada el 13 de enero, momento en que el museo termine una auditoría para determinar el alcance de las pérdidas.