Después de que en julio, Cuauhtémoc Gutiérrez quedara liberado de todas las acusaciones en su contra por encabezar una red de prostitción en la sede del PRI en el DF, tres jóvenes que denunciaron al priísta, impugnaron la decisión de la Procuraduría General de Justicia capitalina (PGJDF).
A más de un año de ser acusado y pese a testimonios, audios y demás pruebas, El Consejo General del Instituto Electoral del DF aprobó en julio la exoneración del PRI y de Cuauhtémoc Gutiérrez por no encontrar elementos suficientes. Parece que ni el audio de casi 4 horas de una mujer inflitrada en el proceso de selección de tan truculenta maniobra, ni los testigos de mujeres reclutadas por Gutiérrez, son suficiente prueba.
Por si fuera poco, recientemente la PGJDF reveló los datos personales de las mujeres que denunciaron la red de prostitución. Este acto viola completamente la privacidad de las víctmas que habían declarado con sus identidades resguardadas, y que ahora no saben si su nombre o sus fotos podrían servir para que alguien las perjudique.
Teresa Ulloa, la abogada de las mujeres afectadas, denuncia que ha recibido amenazas de violación, además de ser fotografiada constantemente durante sus manifestaciones.
Ulloa sigue luchando para que se vuelva a abrir la investigación en contra de Cuauhtémoc. Si la impuganación de las víctimas no procede, irán por un juicio de amparo donde argumentarán que la investigación de la red de prositución se llevó a cabo dentro de una averiguación previa presentada por el PRD y el PAN.