La NBA siempre tiene sorpresas para nosotros, sus espectáculos de medio tiempo son siempre atractivos y el del partido entre el Heat de Miami y los Bulls de Chicago no fue la excepción.
Al terminar el segundo cuarto, de inmediato las porristas de los Toros saltaron a la duela, comenzaron a realizar una coreografía poco usual, ya que jugaban con una compañera que se encontraba en una silla, mientras otras bailaban como suelen hacerlo.
Pasó un minuto y las mascotas del equipo hicieron su aparición, hasta que todo el grupo de baile se quedó al centro de la cancha rodeando a la chica, una de las botargas llamada Benny The Bull, comenzó a hacer un baile raro y de repente el traje se partió en dos dejando ver a un hombre.
La chica que siempre estuvo en la silla de inmediato se llevó las manos a la cara, estaba sorprendida, el público gritaba y es que era el novio de la porrista, quien había armado todo el numerito para pedirle matrimonio a la chica y aunque estaba nervioso (puso el anillo en la mano equivocada) logró su cometido.
Estos hombres nunca dejan de sorprendernos, cuando creemos que hemos visto la petición de mano más extraña del mundo, llega otro y se la gana. Así es el amor, no hace hacer hasta lo que no pensamos.
