Sobre el caso del estudiante de la prepa 8 de la UNAM que estuvo desaparecido por cinco días, luego que policías lo detuvieron “sin violentar sus derechos humanos” (por supuesto), parece que ya todo se va aclarando… para las autoridades, quienes solitas se van dando explicaciones sin -aparentemente- tomar en consideración señalamientos de Derechos Humanos, jueces federales y los propios padres del menor.
Como parte de los primeros avances en las investigaciones del caso Marco Antonio Sánchez, el procurador capitalino, Edmundo Garrido, aseguró que se cuenta con elementos para señalar que ninguno de los cuatro elementos que tuvieron que ver con la detención del menor le ocasionó lesión alguna. Además, aunque sigue siendo un misterio dónde se metió durante los cinco días que estuvo desaparecido (ya que los polis sólo lo tuvieron detenido por 10 minutos) ya se tienen grabaciones que van dando pistas de los lugares que visitó el aventurero chamaco.
En los videos que mostró, el procurador explicó que se puede ver a Marco Antonio siendo arrestado el pasado 23 de enero, en las instalaciones de la estación de Metrobús El Rosario, esto por ahí de las 16:34 horas. Minutos más tarde -a las 16:39- al lugar llega una patrulla… pero fue trepado a la unidad hasta las 16:52. La unidas comenzó su recorrido… pero en el camino los agentes recapacitaron y, después de hablar con el chavo, lo dejaron libre. Esto 10 minutos después de que la patrulla echó a andar.
Ahhh, por cierto. Tanto de la detención, como de la forma en que Marco Antonio fue llevado al vehículo de la policía, de todo eso se tiene grabación. Pero qué creen… no hay video de la patrulla ni del momento en que el preparatoriano fue liberado. Es que las cámaras no servían. ¡Qué mala suerte!… y precisamente de esos dos momentos tan importantes para ver cómo los polis le daban sus recomendaciones y palmaditas en la espalda, pa’ que ya se portara bien y ya no le anduviera tomando fotografías a grafitis. Eso jamás lo veremos.
Pero bueno, de lo que sí se tiene registro en imagen es de cómo -sin mostrar haber sido golpeado- Marco Antonio deambula por una plaza comercial de Tlalnepantla, así como calles del municipio. Eso sin olvidar los videos en los que se le ve tocando los timbres de distintas casas de la localidad mexiquense. “Lo que nosotros estamos poniendo a consideración son los hechos, los videos, son elementos de prueba, se tendrán que reforzar con testimoniales, pero falta la declaración del adolescente, pues no ha habido aún condiciones para ello”, señaló Garrido.
Cuando nosotros vimos los videos de #MarcoAntonioSánchez dijimos él NO es y ya no nos mostraron más imágenes. La @PGJDF_CDMX nos ha hecho una infinidad de investigaciones que nunca pedimos.
Queremos que nos entreguen a nuestro hijo sano: Marco Antonio #AzucenaxMilenio pic.twitter.com/tAA4Dh6m8w
— Azucena Uresti (@azucenau) 6 de febrero de 2018
Gracias a los videos y las declaraciones de los policías, la indignación que llegó a alcanzar este caso ha ido en disminución (en redes sociales pueden leerse comentarios como “¡ven!, si bien que estaba moneado”). Sin embargo, antes de cualquier juicio, los padres de Marco Antonio tienen algunas consideraciones que no fueron tocadas por el procurador en su rueda de prensa. Primero, según señala Simón Hernández, abogado de los familiares del joven, se pidió a las autoridades dejar de difundir información sobre el caso, ya que se quería evitar que Marco Antonio fuera revictimizado (algo que poco a poco se ha conseguido). “Esto fue incluso objeto de medidas precautorias por parte de la Comisión de Derechos Humanos del DF, incluso por orden de un juez federal se le prohibió a la Procuraduría seguir difundiendo información en medios de comunicación”, señala el abogado… pero bueno, parece que eso a los de la PGJ capitalina les valió y armaron su conferencia para ir deslindándose del asunto, digo, para mantener bien informada a la ciudadanía.
Nos parece muy grave que la @PGJDF_CDMX esté haciendo un “juicio” por su lado para justificarlo: Abogado de #MarcoAntonioSanchez en #AzucenaxMilenio pic.twitter.com/juEAE7FQ3S
— Azucena Uresti (@azucenau) 6 de febrero de 2018
Segundo, ya que se indica que los policías liberaron a Marco Antonio, pero de esto no hay ninguna constancia y hasta el propio Garrido acepta que no servían las cámaras de la patrulla en la que el estudiante era trasladado, “nos parece muy grave que las altas autoridades de la CDMX insistan, en lugar de esclarecer, en revictimizar y culpabilizar a Marco Antonio de lo que sucedió”. Tercero, en los videos que el procurador mostró en conferencia, se podría estar viendo a alguien que ni siquiera es marco Antonio. De acuerdo con el padre del menor, en los videos que las autoridades mostraron inicialmente para reconocer a su hijo, sin ningún problema señalaron que ese mero era… no obstante, el pasado sábado fueron llamados a la Procuraduría para mostrarles el nuevo material y, ahí sí, no pudieron reconocerlo. “De antemano ahí su mamá luego, luego dijo no es mi hijo, no es lo mismo cuando los videos que vimos en Tlalnepantla, borrosos y todo y dijimos ese sí es mi hijo. Su mamá, con perdón de la palabra, les dijo que ella no se chupaba el dedo y que no era una tonta como para avalar ese video y que está fuera de contexto”, apuntó el padre de Marco en entrevista para Milenio TV.
Por último… pues si los van a pasar, que los pasen completos. Según Marco Antonio Sánchez (nombre del padre del estudiante), en los videos de las detenciones se les olvidó incluir el momento en que un agente dio un cabezazo a su hijo, así como el hecho de que, aún siendo menor, Marco Antonio fue esposado y tratado “salvajemente”. ¿Cómo sabe que eso pasó? Gracias al testimonio del amigo de su hijo, quien trató de intervenir, pero uno de los agentes lo detuvo. Detalle que tampoco aparece en videos.