La última semana ha sido de muchos movimientos al interior de Morena. El pasado martes, Andrés Manuel López Obrador renunció como dirigente nacional de la organización y se registró como precandidato presidencial. Un día después, el político tabasqueño oficializó lo que hasta entonces era un secreto a voces: el Movimiento de Regeneración Nacional formó una coalición electoral con el Partido del Trabajo (PT) y el ultraconservador Partido del Encuentro Social (PES) para competir por la Presidencia de la República y otros cargos públicos en 2018. Esta determinación levantó cejas e hizo que varios se cuestionaran si en los próximos comicios habrá una opción de izquierda en las boletas. Como para quitar un poco el mal sabor de boca que dejó el anuncio de la alianza “Juntos haremos historia”, ayer, 14 de diciembre, AMLO presentó el que sería su gabinete presidencial en caso de resultar ganador en su tercer intento por llegar a Los Pinos. El equipo de trabajo contiene algunos nombres interesantes y otros un tanto cuestionables.
Morena: ¿progresistas o conservadores?
Durante la presentación del “gabinetazo”, justamente, una fracción de militantes morenistas se manifestó en contra de la alianza con la gente de Encuentro Social. La escritora Elena Poniatowska y la actriz Jesusa Rodríguez extendieron una manta con la bandera de la comunidad LGBTTI y una cartulina que decía “No al PES” (el mensaje estaba acompañado por el dibujo de un pececillo tachoneado). “Somos muchos, no soy yo sola, muchísima gente está indignada y dispuesta a que esto (la coalición) no ocurra, porque lo único que no se puede tolerar es la intolerancia. Morena es respeto y el PES es intolerancia”, dijo Jesusa Rodríguez al finalizar el evento del gabinete. Morena y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) son las únicas organizaciones que cuentan con una secretaría o área dedicada a la diversidad sexual.
Temístocles Villanueva, secretario de Diversidad de Morena, indicó a través de un comunicado que, desde su nacimiento, Morena ha llevado una agenda centrada en la “promoción, protección y defensa de los derechos humanos” dirigidos a la población LGBTTTI y que la decisión de López Obrador también los había tomado a ellos por sorpresa. En otro fragmento de su mensaje, Villanueva aseguró que “ningún derecho es retroactivo, todos los derechos son pro persona” y que el trabajo que han realizado en pro de este sector de la población en las distintas entidades de la República Mexicana no se verán en riesgo por las alianzas partidistas. El integrante de Morena indicó en su carta que AMLO le aseguró, personalmente, que “las libertades no están a discusión, no vamos a ceder ante el conservadurismo”.
Para poner en contexto: el Partido Encuentro Social se opone férreamente al matrimonio igualitario y el aborto y defiende, en el mismo talante, el concepto de “familia tradicional”. Morena, en teoría, es un partido de izquierda que busca defender las libertades y los derechos humanos, y debería de representar exactamente lo contrario. En noviembre de 2016, la diputada Edith Martínez, comparó el matrimonio gay con casarse con “delfines o laptops”. Así como lo leen, esta es la declaración: “¿Cómo nos recordarán nuestros nietos, cuando vean a su alrededor los absurdos que ya se ven en Canadá, en Holanda y en Inglaterra, casos reales de gente casándose con delfines o con laptops?”.
Por si esto fuera poco, el PES ha apoyado en el pasado al Partido Acción Nacional (fungió como aliado del expresidente Felipe Calderón Hinojosa), al Partido Revolucionario Institucional (apoyó la candidatura de Alfredo del Mazo en el Estado de México hace medio año) y hasta a Jaime Rodríguez Calderón “El Bronco”, actual gobernador de Nuevo León. Este grupo ha sido vinculado con el secretario de Gobernación y exgobernador de Hidalgo, Miguel Ángel Osorio Chong, y el exprocurador general de la República Jesús Murillo Karam.
AMLO: “juarista y guadalupano”
Antes de presentar a su posible gabinete, López Obrador declaró a medios de comunicación que no encontraba contradicciones en la alianza con el Partido del Trabajo y con Encuentro Social. El político tabasqueño se definió como “guadalupano y juarista“. El exjefe de Gobierno de la Ciudad de México ha sido criticado en ocasiones anteriores por no tener una postura clara respecto a algunos temas como la legalización de la marihuana, el aborto o el matrimonio igualitario. Siempre que el tres veces candidato presidencial es cuestionado en ese sentido, responde que dichos aspectos serán sometidos a consulta popular e incluso los ha catalogado como “no tan importante“.
En una grabación compartida en redes sociales este viernes 15 se puede escuchar al precandidato presidencial de Morena referirse de una manera más directa sobre el tema: “Que quede claro para todos y, de manera especial, para la comunidad gay: no somos oportunistas, no luchamos sólo por los votos, luchamos por principios, luchamos por ideales y no tiene nada que temer. Vamos a respetar la diversidad sexual”. ¿Qué pasará con esta alianza entre un partido que, supuestamente, defiende las causas de las minorías y otro que busca coartar derechos? ¿Qué pasará con esta unión entre antagonistas ideológicos? La respuesta probablemente la tendremos antes del 1 de julio.
