Y puede que la mayoría de los detenidos ya fueron puestos en libertad (según), pero la violencia de parte del gobierno de la presidenta de Perú, Dina Boluarte, quedó en evidencia… otra vez: recordemos que ya van más de 60 muertos durante las protestas tras la destitución y detención del expresidente Pedro Castillo.
Este fin de semana, la policía entró por la fuerza a las instalaciones de la Universidad Nacional de San Marcos en Lima. Y cuando decimos que fue “por la fuerza”, es porque hasta se usó una tanqueta para irrumpir en la mencionada universidad, para luego ejecutar la detención de casi 200 personas que estaban por sumarse a las movilizaciones contra el gobierno de Dina Boluarte.
De acuerdo con medios locales de Perú, los manifestantes detenidos estaban acampando en las instalaciones de la Universidad de San Marcos. En las imágenes que se difunden en redes, ya sólo se ve cuando los uniformados tienen a las personas en el piso, sin embargo, testimonios señalan que los elementos de la policía hicieron uso excesivo de la fuerza, amenazando con sus fusiles a los jóvenes.
A la universidad llegaron legisladores representantes de la izquierda. Sin embargo, la policía les negó el acceso, esto pese a que su única intención era verificar el trato que se les estaba dando a los detenidos.
Para justificar la violenta irrupción en la universidad de San Marcos, el gobierno de Dina Boluarte señaló que, quien ordenó las acciones (el fiscal de la Cuarta Fiscalía Corporativa Penal), acusó la presunta comisión de los delitos contra el patrimonio de parte de los manifestantes. Uno de estos delitos es el de “daños”… y por eso pidió usar tanqueta, la cual dejó la entrada de la Universidad en calidad de escombro.
En el comunicado difundido por la Fiscalía de Perú se indica que, una vez detenidos, los manifestantes fueron puestos a disposición de las autoridades, para la realización de exámenes médicos y la toma de declaraciones. Todo con respeto a los derechos humanos (pues si hasta hubo fiscales especializados en la materia, para echar ojo… según).
“Culminadas las diligencias en las sedes policiales y recibido el informe policial correspondiente, el fiscal provincial penal ha dispuesto la libertad de 192 personas, quedando una detenida por tener requisitoria”, señala la Fiscalía de Perú.
Ante tan violenta detención de manifestantes, la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU en Perú pidió al gobierno de Dina Boluarte bajarle dos rayitas a la forma en que actúa durante las protestas. Que haya “proporcionalidad de la intervención y garantías de debido proceso”… mínimo.
Por su parte, pese a lo represivo que se ha visto, el gobierno de Dina Boluarte se colgó del mensaje que ofreció el Papa Francisco sobre la situación que se vive en Perú, asegurando que, así como lo pidió el líder católico, lo que se busca es el “diálogo entre hermanos de una misma nación”. Seeee, se ve.
