Además del equipo AfghanDreamersTeam —integrado por un grupo de jóvenes que trabajó en el desarrollo de ventiladores para atender a pacientes con COVID-19 y de ganar el campeonato Internacional de Robótica—, la madrugada de este 25 de agosto México recibió a más de cien personas, la mayoría periodistas, corresponsables y staff que laboraba en Kabul, Afganistán.
Desde Doha —y con una última escala en el Aeropuerto de Cancún—, alrededor de las 4:30 de la mañana un avión de la Fuerza Aérea de Qatar aterrizó en Ciudad de México con la esperanza de más de cien personas, periodistas, corresponsales y personal de distintos medios de comunicación (como el New York Times o Washington Post) que laboraban en Kabul y que pidieron una visa humanitaria, refugio o asilo a México.
Como esta no es la primera vez que México vive un proceso como este y abre sus puertas, Marcelo Ebrard contó en redes que la revisión de las solicitudes de refugio comenzaron en la Embajada de México en Teherán, Irán, y de ahí pal real.
México recibe a periodistas, corresponsales y staff de Kabul, Afganistán
De acuerdo con el secretario de Relaciones Exteriores, se trata de un grupo de periodistas, corresponsables y staff que —junto con sus familias— hicieron un viaje de 20 horas de vuelo.
Sin embargo, aquí viene un detalle bien importante de esta historia. El mismo New York Times contó que pudo salvar la vida de sus colaboradores gracias a la intervención de México, ya que Estados Unidos demoró en la respuesta.
El New York Times estuvo tocando base, gestionando que algún país le diera salida a los colaboradores y en México encontró una respuesta.
Martha Delgado explicó que no fue nada fácil, comenzando con las salidas y entradas a Aeropuerto de Afganistán, los trámites. Sin embargo, México pudo gestionar el proceso de las visas humanitarias —en el caso de Estados Unidos es algo diferente porque es más complejo y con un buen de restricciones— y el resultado fue este.
Tanto las personas que llegaron desde Qatar hasta las jóvenes del equipo de robótica cuentan con visas temporales, la posibilidad de prórroga, un hogar y también con el poder de decidir su futuro: quedarse en nuestro país o tocar base en otras naciones.
En el caso de las jóvenes afganas —que desarrollaron ventiladores para atender a pacientes con COVID-19 con partes usadas de autos—, México está gestionando su encuentro con equipos de robótica nacionales.
Mientras sigue este proceso, el gobierno de AMLO propondrá en la CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños) que los países repliquen esta respuesta y abran sus puertas a la ayuda humanitaria.
Llega a México grupo de jóvenes afganas que solicitó ayuda para salir de su país
