La violencia contra la prensa en México está en un punto crítico. Hemos escuchado que —aún contando las zonas de guerra— nuestro país es de los lugares más peligrosos para levantar la cámara, tomar el micrófono o sacar la pluma. Los asesinatos de periodistas cobran relevancia nacional y es que la situación es verdaderamente preocupante.
Al momento de leer esta nota, han asesinado a 17 periodistas en lo que va de 2022.
Los periodistas asesinados en México
La organización Artículo 19 —dedicada a proteger la libertad de prensa o los derechos de los trabajadores en los medios— ha registrado más de 40 periodistas asesinados en lo que va del sexenio de Andrés Manuel López Obrador. El primer periodista asesinado en este sexenio fue apenas a un día de iniciado: cuando mataron a Alejandro Márquez de Orión Informativo en el estado de Nayarit, en diciembre de 2018.
Sin embargo, la situación se ha ido poniendo cada vez más complicada en 2022.
Este año, el primer caso fue el 10 de enero pasado con el asesinato de José Luis Gamboa Arenas, periodista de Inforegio Network en Veracruz. El cuerpo del comunicador fue encontrado con heridas de arma blanca.
Siete días después, el 17 de enero, fue asesinado Margarito Martínez, fotoperiodista que trabajaba como freelancer en Tijuana, Baja California.
El pasado 25 de febrero, en la mañanera, el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval, confirmó la detención de 5 personas relacionadas con el asesinato del periodista, quien murió por impactos de bala afuera de su domicilio.
Seis días después, el 23 de enero, la periodista Lourdes Maldonado, de Sintoniza sin Censura, fue asesinada en Tijuana, Baja California.
De acuerdo a información obtenida por el semanario ZETA, la periodista Lourdes Maldonado —que se hizo muy conocida en México por haber ido a la Mañanera a pedir protección— fue atacada por sujetos desconocidos que le dispararon, cuando llegaba al estacionamiento de su casa; junto a ella se encontraban todas sus pertenencias, por lo que se descartó un asalto.
Siete días después, el 31 de enero, el medio Monitor Michoacán confirmó el asesinato de uno de los colaboradores, Roberto Toledo.
El director del medio explicó que la muerte de uno de sus compañeros es consecuencia de la corrupción del gobierno que no los escuchó cuando denunciaron las amenazas de muerte y el acoso que venían experimentando de meses atrás.
Después de condenar el asesinado, el vocero de presidencia, Jesús Ramírez Cuevas, afirmó que, de acuerdo con investigaciones judiciales, como Toledo también era auxiliar en un despacho de abogados, no lo contarían como periodista en las estadísticas oficiales.
10 días después, el 10 de febrero, fue asesinado Heber López Vázquez, de Noticias Web en Oaxaca. El periodista fue asesinado en el barrio Espinal de Salina Cruz, Oaxaca. Se encontraba al interior de su estudio de grabación.
14 días después, el 24 de febrero, asesinaron a Jorge Luis Camero, periodista director del portal de noticias El Informativo. La Fiscalía explicó que recibió varios disparos con un arma de fuego mientras se encontraba al interior de un gimnasio en la colonia Libertad, del municipio Empalme, del estado de Sonora.
Ocho días después, el 4 de marzo, fue asesinado Juan Carlos Muñiz, de Testigo Minero, en Fresnillo, Zacatecas. Se sabe que le dispararon cuando conducía un taxi, su cuerpo fue encontrado en la calle Ficus del fraccionamiento Los Olivos.
El portal Testigo Minero condenó el asesinato del periodista y exigieron a las autoridades que este caso sea tomado de manera directa en la Fiscalía General de Justicia del Estado para que se realicen las investigaciones correspondientes. El presunto homicida fue detenido el pasado 15 de marzo.
11 días después, el 15 de marzo, fue asesinado Armando Linares, director del portal Monitor Michoacán y quien confirmó el asesinato de Roberto Toledo.
“Hoy lo cumplieron… vamos a seguir señalando corrupciones y políticos corruptos aunque la vida nos vaya en ello. Lamento este hecho, lamento que las cosas sean así y que se trate de coartar la libertad de expresión. Hoy Monitor Michoacán está de luto, no se que vaya a pasar, pero sí les digo que no vamos a quitar el dedo del renglón. Malditos aquellos que hoy atentaron contra la vida de una persona inocente“, dijo el periodista el día en que asesinaron a Toledo.
El 5 de mayo asesinarían en Culiacán a Luis Enrique Ramírez, periodista de Sinaloa conocido por su columna El Ancla.
Ramírez había fundado el medio Fuentes Fidedignas y trabajaba en El Debate, había escrito dos libros y tenía más de 14 premios de periodismo. Sus palabras hacían eco en escala nacional —donde había reportado en varios medios capitalinos. Su cuerpo fue encontrado sin vida a las afueras de la ciudad, en el sur de Culiacán, después de haber sido privado de su libertad en un lugar cercano a su domicilio.
Apenas cuatro días después, la tragedia en la violencia contra los medios llegó a Veracruz.
Dos compañeras del portal El Veraz fueron asesinadas en el municipio de Cosoleacaque. Se trataba de la directora Yesenia Mollinedo Falconi y la reportera Sheila Johana García Olivera.
Unas semanas después, el 29 de junio, se reportó otro periodista asesinado más en México. Se trataba de Antonio de la Cruz (@tonypresss), reportero de Expreso y que cubría información ambiental, de salud y política en Tamaulipas.
Fue víctima de un ataque directo en donde también murió su hija y su esposa salió herida.
Pasó poco más de un mes cuando volvió a suceder.
El 2 de agosto —aproximadamente a las 11 de la noche— un comando armado irrumpió en un bar de cervezas propiedad de Ernesto Méndez. Méndez era director del medio “Tú Voz” y trabajaba en Guanajuato. El periodista falleció en el ataque.
Ernesto Méndez había denunciado anteriormente que lo habían amenazado. “El periodista tenía antecedentes de amenazas por lo que llama a la FEADLE de la FGR a atraer el caso y consideren su labor informativa como móvil del crimen”, explicó la organización Articulo19 en un mensaje explicando el asesinato.
Después seguiría un momento de violencia extrema en México. Durante la semana de los atentados en cuatro ciudades distintas, el caso del locutor Allan González cobraría reconocimiento nacional.
González murió en un atentado en las afueras de una pizzería en Ciudad Juárez junto con otros compañeros de MegaRadio. locutor moriría en un atentado en una pizzería de Ciudad Juárez.
También, el 16 de agosto, se agregaría a esta oscura lista la muerte de Juan Arjón López.
Arjón López era director de la página a A Qué Le Temes y tenía cerca de una semana reportado como desaparecido. La última vez que lo vieron con vida fue en el municipio fronterizo de San Luis Río Colorado y su búsqueda —a pesar de las denuncias— fue encabezada por sus familiares y compañeros. .
Menos de una semana después volvería a suceder.
Fue el 22 de agosto cuando Fredid Román fue asesinado en Chilpancingo, Guerrero, mientras estaba en su automóvil. Los reportes recuerdan que había personas esperándolo afuera de su domicilio. Román fue colaborador del diario Pueblo y también había sido corresponsal de la revista Quehacer Político.
La tarde del 21 de noviembre Pedro Pablo Kumul, reportero y locutor, recibió un disparo mientras conducía un taxi en la localidad del Castillo, en Xalapa, Veracruz.
De acuerdo con lo que se sabe, los ocupantes de una camioneta blanca lo persiguieron y le dispararon. Pedro perdió el control del carro, se estrelló contra un poste y perdió la vida. Trabajaba en AX Multimedios, en Es Amor 104.5 HD.
En el carro viajaban una mujer y una menor que resultaron ilesas.
