Ayer los argentinos pusieron fin al kichnerismo que durante varios años se encargó de dirigir los destinos del país, esto al elegir al opositor Mauricio Macri como su nuevo presidente. Aunque criticado por tener un pasado empresarial, el hombre de 56 años recibió el respaldo de 51% de los votantes, por encima de Daniel Scoli, quien obtuvo 48.6% de los sufragios ¿qué vieron en él los sudamericanos?
De tendencia centroderecha, el ganador de la segunda vuelta presidencial es hijo de un reconocido empresario con el que, aseguran diversos medios, llevó una mala relación, razón por la que decidió emprender carrera política en lugar de heredar los negocios familiares.
Ingeniero de profesión (por cierto, será el primer presidente argentino egresado de una universidad privada), Macri es recordado por haber sido ya presidente… pero del club de futbol Boca Juniors de 1995 a 2008, buena época: el equipo obtuvo 17 títulos que llevaron al Boca a ser reconocido como el mejor equipo de la década de 2010 para América del Sur por la Federación Internacional de Historia y Estadística del Fútbol.
Pero bueno, en el plano político Macri fue diputado por Buenos Aires, ciudad de la que actualmente es jefe de gobierno, además de ser el fundador del partido Compromiso para el Cambio. Opositor de Cristina Fernández de Kichner, el candidato de Cambiemos basó su campaña en cuatro grandes propuestas: “Pobreza cero”, “Terminar con el narcotráfico”, “Unir a los argentinos” y el llamado “Plan Belgrano para el norte argentino”.
Para la primera propuesta, el nuevo presidente prometió ampliar la cobertura del ingreso ciudadano, convocar a un gran pacto educativo nacional, ayudar a crear empleo y a reducir el empleo informal, “que paga menos y no tiene beneficios para el trabajador”; además de urbanizar villas y asentamientos y lanzar un programa ambicioso de regularización de títulos de propiedad.
“Un país con 14 millones de pobres, como el que tenemos ahora, no puede estar orgulloso de sí mismo”.
Respecto a la propuesta relacionada con el narcotráfico, Macri reconoció que éste es la principal amenaza en la seguridad de los argentinos, por ello “decidí que terminar con el narcotráfico sea uno de los tres desafíos de mi presidencia”. Además de detener a los principales líderes del narco, el presidente electo propuso erradicar el paco, la conocida “droga de los pobres” en Argentina, elaborada a partir de los desechos una droga, la cocaína. “Sí, creo que es posible erradicar el paco de la Argentina y proteger a los chicos que hoy están siendo explotados por estas bandas”.
Dada las diferencias políticas que en los últimos años se han reafirmado aún más, “Unir a los argentinos” es la idea que tiene Macri para “convivir mejor, en una sociedad libre, plural, diversa y democrática”. Como parte de esta propuesta se tiene contemplada la evaluación del presidente y de su administración, la defensa de la libertad de expresión, la promoción de una reforma del Consejo de la Magistratura, “para que esté el mejor juez posible en cada juzgado” y también actualizar el sistema de votación, “para proteger el sueño de cada argentino que se acerca a las urnas”.
Por último, con el “Plan Belgrano para el norte argentino”, el presidente electo propuso compensar a las diez provincias del norte de Argentina por “tantos años de indiferencia y desagradecimiento”. Parece que esta propuesta rindió frutos, ya que logró ganar en provincias con fuerte tradición peronista. Dos muy simbólicas: Jujuy y La Rioja, las cuales son regiones que forman parte del “Plan Belgrano…”
Pues veremos cómo les va a los argentinos que decidieron abandonar la política peronista para favorecer al derechista, que se define a sí mismo simplemente como un hombre casado con cuatro hijos e “hincha de Boca”.
