Durante su intervención en la apertura de la planta Ternium, en Nuevo León, Peña Nieto cejó durante un desesperado instante y erró. Llamó estado a la ciudad de Monterrey.
El ciudadano presidente de nuestro vasto país viajó este miércoles a Nuevo León para inaugurar el centro industrial Ternium, una planta en la que se invirtieron más de mil millones de dólares y que producirá esas láminas de acero que tanto necesitamos todos y todas.
En el evento, el primer mandatario e impulsor de la reforma educativa estuvo acompañado del gobernador del estado de Nuevo León, Rodrigo Medina de la Cruz; el secretario de Economía, Idelfonso Guajardo, así como del presidente de Ternium México, Máximo Bedolla. Tampoco dejó de saludar a:
“los titulares de los poderes legislativo y judicial de esta entidad y al señor comandante de la región militar aquí en el estado de… Monterrey“
Peña Nieto aprovechó la ocasión para hacer hincapié en que las reformas que ha impulsado son cimientos sólidos para el México del siglo XXI. Probablemente quería referirse a otro país, uno nunca sabe.